El papa Francisco, de 88 años, fue ingresado este viernes en el hospital Agostino Gemelli de Roma para continuar con su tratamiento contra la bronquitis que le ha causado dificultades respiratorias en los últimos días. Según informó el Vaticano, el pontífice acudió al centro médico tras cumplir con su agenda matutina, que incluyó una reunión con el primer ministro eslovaco, Robert Fico.
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Desde la semana pasada, el papa ha tenido problemas para respirar, lo que lo obligó a delegar la lectura de sus discursos y realizar audiencias en su residencia. En su audiencia general del miércoles, tuvo que pedir a un asistente que terminara de leer su intervención, comentando: “Déjenme pedirle al padre que continúe leyendo porque aún no puedo con mi bronquitis”.
El hospital Gemelli, donde el papa ya ha sido tratado en ocasiones anteriores, cuenta con un área preparada especialmente para su atención. En junio de 2023, Francisco pasó diez días internado en este mismo centro tras una operación de hernia abdominal. También ha sufrido otros problemas de salud en los últimos años, como inflamación del colon y dolores en la rodilla y la cadera.
A pesar de estos desafíos, el papa ha mantenido una agenda intensa, con audiencias diarias y viajes internacionales. En septiembre de 2024, realizó su periplo más largo, visitando Papúa Nueva Guinea, Timor Oriental, Indonesia y Singapur en un viaje de 12 días.