España cumple hoy 300 días sin gobierno, pero a pocos de sus ciudadanos parece molestarles eso ante el crecimiento económico del país.
Los cafés y restaurantes de muchas ciudades están llenos, al igual que las tiendas de modas y galerías de arte, y los turistas siguen llegando.
La impresión en general es la de un país vibrante y ajetreado. Tal parece que el gobierno no es necesario.
Dos elecciones no concluyentes del 20 de diciembre y el 26 de junio dejaron al conservador Partido Popular (PP) al frente de un gobierno provisional por los últimos nueve meses: hoy se cumplen 300 días.
El partido ganó ambas elecciones, pero no alcanzó la mayoría y ahora tiene hasta el 31 de octubre para conseguir el apoyo necesario para crear un gobierno minoritario o España enfrentará una tercera elección.
Sin embargo, no hay motivo para caer en pánico.
Un sondeo de CIS este mes reveló que la principal preocupación de los españoles, por mucho, es un desempleo nacional del 20 por ciento.
Después de eso, los encuestados mostraron preocupación por la corrupción y se manifestaron decepcionados de los políticos y sus partidos.
La ausencia de un gobierno quedó en el quinto sitio.
«La política en España es caótica, los partidos sólo están interesados en ellos mismos», afirmó José Luis Alfonso, un técnico de computadoras de 52 años.
«Ellos aseguran que no afecta a la economía, pero imagino que sí. Quizá estaremos mejor sin un gobierno».
Pero el profesor de Economía José Ramón Pin, de la escuela de posgrados IESE Business School, al igual que otros expertos, advierte que la impresión de que a España le va bien sin gobierno es engañosa.
«Es verdad que un país puede mantenerse sin gobierno. El problema es cuando lo hace por mucho tiempo», subrayó Pin.
El caso de España no es único. Bélgica impuso una marca europea al sumar 541 días necesitando crear un gobierno luego de las elecciones de 2010.
Actualmente, Rajoy cuenta con el apoyo de 170 legisladores en el Parlamento nacional de 350 escaños -137 de ellos de su propio partido-, pero necesita el respaldo de otros partidos, o abstenciones, en un voto de confianza si desea crear un gobierno minoritario.
España nunca ha tenido un gobierno de coalición y sus partidos políticos parecen incapaces de llegar a acuerdos.
La especulación, sin embargo, gira en torno a que el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) que encabeza la Oposición y cuyo líder renunció en medio de la parálisis, podría abstenerse si se realiza una votación este mes.
Mientras tanto, España es una de las economías de mayor crecimiento de la Unión Europea.
El Fondo Monetario Internacional pronosticó que España crecerá 3.1 por ciento este año, tan fuerte como cuando contaba con un gobierno el año pasado.
Sin embargo, el panorama a futuro no es tan alentador.
El Banco Central ha advertido que el punto muerto político podría tener efectos económicos negativos hasta que las cruciales reformas para garantizar el crecimiento a largo plazo no sean implementadas.
Pin, el profesor de Economía, subrayó que existe la razón principal del continuo crecimiento es que el presupuesto de España para 2016 fue aprobado antes que se registrara la parálisis política.
«El problema será en 2017, porque aún no hay presupuesto y las inversiones públicas, la política fiscal o la distribución monetaria no serán conocidas hasta entonces», explicó.
Otro problema potencial es la amenaza de la Unión Europea con imponer sanciones a España si no frena su inflado déficit presupuestal.
Fuente: Reforma