Charlie Hebdo, el semanario francés famoso por hacer viñetas satíricas de religión, política y conflictos sociales, ha causado un nuevo revuelo por sus dibujos sobre el terremoto que sufrió Italia el pasado 24 de agosto. Autoridades italianas como el alcalde de Amatrice, Sergio Pirozzi, y las redes sociales han expresado su indignación por los últimos dibujos publicados, donde incluso han mostrado a las víctimas enterradas entre escombros como si fueran lasaña.
En esta viñeta se puede leer la frase «Terremoto a la italiana: penne con salsa de tomate, penne gratinados y lasaña». Cada plato se corresponde con una imagen dibujada que muestra a un hombre ensangrentado, a una mujer con el rostro con moratones y heridas, y el dibujo de cuerpos bajo los escombros.
Al alcalde de Amatrice ha mostrado su enfado porque el semanario haya utilizado el humor negro para satirizar una desgracia. «Pero cómo es posible que se haga una viñeta sobre los muertos. Estoy seguro que esta sátira desagradable y vergonzosa no responde al verdadero sentimiento de los franceses», ha dicho Pizzo a los medios locales. «Bienvenida es la ironía, pero sobre las desgracias y sobre los muertos no se hace sátira», ha agregado.
«No fue Charlie Hebdo quien construyó vuestras casas, ¡fue la mafia!», dice esta otra viñeta del semanario.
También la diputada del Partido Demócrata (PD), que lidera Matteo Renzi, Vanna Iori, ha condenado esta viñeta a través de un comunicado. «El mundo entero se ha levantado en defensa de Charlie Hebdo cuando el semanario satírico francés fue víctima del atentado terrorista cometido por el Estado Islámico. Con la misma firmeza, hoy, debemos condenar la viñeta que ironiza sobre el terremoto que ha devastado el centro de Italia», ha afirmado.
Los comentarios también se han sucedido en las redes sociales, donde usuarios italianos han utilizado frases como «vergüenza» o «no es normal que los franceses, golpeados tantas veces por la mano del hombre, hagan sátira con nosotros, sacudidos por la fuerza de la naturaleza».
El pasado 24 de agosto, un terremoto de magnitud 6 en la escala de Richter azotó el centro de Italia, causó enormes daños en numerosas localidades y la muerte de al menos 294 personas.
Fuente: El País