El año 2050 será el más crítico para las especies vegetales de los ecosistemas del área central del país, principalmente en Puebla, Hidalgo y Veracruz, incluso algunos desaparecerían debido a los efectos de los gases de invernadero.
Así lo señaló la egresada de Biología de la BUAP, Miriam Reyes Ortiz, con su investigación “Efecto del cambio climático en la distribución geográfica de árboles de bosque de niebla en la parte centro de México: Hidalgo, Puebla y Veracruz”, con la cual obtuvo el segundo lugar en el concurso nacional de trabajos universitarios “Proyectos sobre Áreas Naturales Protegidas y Cambio Climático” de la Semarnat.
A través de herramientas de simulación hizo dicha predicción, la cual se basó en prospecciones para determinar el número de especies a nivel local -la diversidad alfa- en 102 fragmentos de bosque de niebla.
Asimismo, utilizó los denominados modelos de nicho ecológico, que le permitieron simular los efectos del cambio climático sobre la biodiversidad, en diferentes escalas espaciales y temporales.
Veracruz con menos afectaciones
Reyes Ortiz encontró que Veracruz fue el que presentó una mayor diversidad a lo largo de los diferentes horizontes de tiempo, y con menores efectos negativos -a excepción de la región de Los Tuxtlas.
Reiteró que dichos ecosistemas albergan una gran biodiversidad, desempeña un papel importante hidrológico y son de los más vulnerables al cambio climático.
Agregó que dicha investigación, dirigida por el académico Daniel Jiménez García, del Centro de Agroecología y Ambiente del Instituto de Ciencias (Icuap), es importante porque el calentamiento global representa la mayor amenaza para los ecosistemas, la diversidad biológica y la humanidad.
Cabe mencionar que los modelos de simulación fueron alimentados con registros de ocurrencia de las 108 especies más representativas de estos ecosistemas y 19 variables bioclimáticas de Worldclim para diferentes horizontes de tiempo (2020, 2050 y 2080) y escenarios climáticos (A1, A2, B1 y B2, dos de escala global y el resto de carácter regional), usando el modelo acoplado CGCM2.
Fuente: Angulo 7