Recientemente la sola mención del concepto pone a temblar al Ministerio Público. La invocación del “debido proceso”, o mejor dicho de las fallas en su observancia, pone en riesgo el trabajo previo para detener, consignar; llevar a juicio o intentar justicia. En cualquier caso todo el trabajo previo se puede ir al caño…
En esas condiciones –con justificado estupor e indignación ante los hechos– se ha sabido de cómo el Sexto Tribunal Unitario del Segundo Circuito, con sede en Toluca, ha revocado el auto de formal prisión contra María de los Ángeles Pineda Villa, esposa del siniestro ex alcalde de Iguala, José Luis Abarca.
Un amparo concedido a la acusada invoca fallas en el proceso, las cuales consisten en bloqueo a la presentación de pruebas de descargo contra la grave acusación de haber sido –junto con su esposo– autora intelectual del ataque y desaparición de los normalistas de Ayotzinapa.
¿Una falla en el “debido proceso” la podría llevar de regreso a la vida ordinaria?
La violación invocada por la acusada es superficial; lo grave es la facilidad con la cual delitos de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita puedan ser desestimados por los jueces mediante un tecnicismo, de ninguna forma comparable al horror de los delitos motivo del proceso judicial.
Obviamente la PGR no cruza los brazos; ya hace lo necesario para proseguir con las demás acusaciones en contra de esta cruel mujer. La institución ministerial aclara que el amparo concedido a la señora en ningún momento implica la libertad de la procesada, sino la oportunidad de reponer el procedimiento y eventualmente solicitar un nuevo auto de formal prisión, toda vez que quien también está sujeta a prisión por el Juez Tercero en Materia de Procesos Penales Federales, en Tamaulipas, también por delitos contra la salud y vínculos con la delincuencia organizada.
Mientras la PGR procede con diestros malabares para salvar con premura otro bochornoso ridículo, se evidencia ante los hechos que la cacareada Reforma al Sistema de Justicia termina siendo una puerta giratoria.
¡Pásele, pásele, total por aquí mismo puede salir!
EL MONJE LOCO: El arroz en el infierno de Guerrero casi, casi, está cocido. A 41 días de la elecciones el candidato del PRI-Verde –Héctor Astudillo– le llevaría 10 puntos a la candidata del PRD-PT –Beatriz Mojica–. Pero más allá de los datos fríos, hierve el miedo por las cavernas del desánimo, la desconfianza, y el peligro de boicot.