El primer ministro británico, David Cameron, reconoció el sábado que no había gestionado adecuadamente la información revelada por los «Panama Papers» sobre su participación en una empresa «offshore» propiedad de su padre, al tiempo que centenares de personas pedían su dimisión frente a Downing Street.
Mientras en la capital de Islandia se preparaba una gran manifestación por sexto día consecutivo por el mismo escándalo, que ya ha provocado la dimisión de su primer ministro, en Londres las voces a favor de la salida de Cameron son mucho menos numerosas.
«Sé que debería haber gestionado mejor este asunto», dijo en el Congreso. «No culpen a mis consejeros: asumo la culpa. He aprendido la lección». A continuación, reiteró su promesa de publicar «próximamente» sus declaraciones de impuestos de los últimos años, un gesto inédito por parte de un primer ministro en el país.
El escándalo de los «Panama Papers» también ha tenido su eco este sábado en Holanda, donde dos diarios locales afirmaron que la la ONG holandesa Solidaridad poseía una red internacional de sociedades pantalla.
Fuente: La Jornada