Han transcurrido 12 años de los asesinatos de los hermanos Erik Azur y María Fernanda Peña Coss… Diego Santoy Riveroll, entonces de 21 años, fue señalado como el culpable de la atrocidad que conmocionó a la sociedad.
El móvil del crimen ubicó a Santoy Riveroll como un novio despechado por el rompimiento de su relación con Erika, la hermana mayor de los menores asesinados; cegado por la ira, el 2 de marzo del año 2006 el joven ingresó a la residencia de la familia Peña Coss, ubicada en la colonia Cumbres, en Monterrey…
Tras asesinar a Erik y María, lesionó Erika y secuestró a la empleada doméstica, a quien luego de encerrarla en la cajuela de un automóvil, huyó del lugar.
Luego de varios días, Diego fue detenido junto con su hermano… fue sentenciado a una pena de 137 años de prisión, sin embargo logró reducir su condena a 71, pero la legislación vigente en la entidad establece que no puede pasar más de 40 años tras las rejas.
Santoy Riveroll fue llamado “El asesino de Cumbres” y sobre su personaje se han realizado películas, documentales e incluso, por bizarro que parezca, tiene un club de fans.
A más de una década de los hechos, en redes sociales se sigue discutiendo si Erika también tuvo responsabilidad en el crimen de los menores y si debería estar en la cárcel.
Actualmente, Diego se encuentra recluido en el penal de Cadereyta, una de las últimas noticias que se tuvo sobre él es que resultó lesionado durante uno de los hechos violentos registrados en ese centro penitenciario el año pasado.
En el penal, Santoy Riveroll se casó con la líder de su club de fans y tuvieron un hijo; por su parte, Erika se casó en el estado de Guanajuato, sitio al que se mudó luego del hecho que cambió la vida tanto de su exnovio como de toda la familia Peña Coss.
A la fecha, el “Asesino de Cumbres” tiene 33 años y continúa estudiando además de que es calificado como una persona tranquila por el resto de los reos.
Fuente: Excélsior