Mucho se habla acerca del daño que uno puede hacerle a los niños que son dados en adopción a una pareja homosexual. De lo mucho que se habla, muchas son ideas y suposiciones poco fundadas para sustentar tan graves acusaciones. Nosotros nos hemos pronunciado totalmente en contra de este tipo de discriminación. Para apoyar nuestro argumento, como siempre, recurriremos a la ciencia.
Un método científico observa fenómenos naturales, postula una hipótesis y después ésta se comprueba mediante la experimentación. Lo que les vamos a contar hoy son meros hechos que estudiaron casos de adopción de parejas homosexuales. No son ideas, ni suposiciones. Son cosas que ya pasaron y que podemos analizar a la distancia. ¿Tan mal les va a los hijos de las parejas homosexuales?
La respuesta rápida es NO, no les va mal. Pero mejor comprobar sin ninguna suposición ni “ideología” detrás:
Metodología
En el primer estudio que analiza esta cuestión, se compararon niños y niñas que fueron adoptados de una casa hogar y dados a parejas gay, lesbianas y heterosexuales.
Los investigadores de la Universidad de California en Los Angeles (UCLA) rastrearon y siguieron el progreso de 82 niños/as en el condado de Los Angeles, 22 de ellos adoptados por parejas homosexuales a la edad promedio de cuatro años. Se evaluaron al pasar dos meses de ser entregados a sus familias adoptivas y después, dos años más tarde, se valoró de nuevo su situación.
Aunque se han hecho estudios previamente de niños adoptados por una pareja homosexual, los de este estudio tenían factores biológicos y externos de riesgo en su contra (como nacimiento prematuro, exposición prenatal a sustancias nocivas, abuso, negligencia, etc.).
Resultados
Los niños en los tres diferentes tipos de familia se beneficiaron bastante de la adopción: en promedio, desarrollaron significativamente sus habilidades cognitivas, sus puntuaciones de IQ subieron hasta 10 puntos y mantuvieron niveles estables en sus problemas de comportamiento.
Es de notoria importancia que los niños adoptados por parejas homosexuales tenían más factores de riesgo y era más probable que fueran de una nacionalidad distinta a la de su familia adoptiva. A pesar de lo último, dos años después vivían en completa igualdad de bienestar a los que fueron adoptados por parejas heterosexuales.
Conclusión
La coautora del estudio, Letitia Anne Peplau, lo dijo bien claro: “No existen bases científicas para discriminar en contra de las parejas gay y lesbianas.”
Después de esto, es necesario recalcar que para poder obtener un niño en adopción se tienen que pasar muchos filtros e investigaciones. Las personas encargadas del proceso no le van a dar un niño a todas las parejas homosexuales sólo porque quieren y ya. El hecho de que una pareja logre este cometido, significa que son aptos psicológica y económicamente, y tienen la voluntad para criar un ser humano de manera sana…
Fuente: ClickNecesario
2 comentarios
Porque recurrir a la ciencia,? Dios no se equivoca, se ve burdo, osco, grosero de que homosexuales adopten, y no tengo nada en contra de ellos, su vida sexual e íntima es de ellos, pero, más allá de agotar niños! No! Que adopten perros!
Por qué recurrir a la religión? Si no tiene evidencias de lo que afirma.