Colaboración de Guillermina Gómora Ordóñez
El México bárbaro y el México bronco se confrontan y nada, ni nadie, parece detener su creciente espiral de violencia que consume cientos de vidas todos los días.
Vergonzantes estadísticas, que hace años ocuparon un lugar de privilegio en los principales diarios del país. Un clasificado conteo de muertos, que se publicaba todos los días y que al parecer cansó a sus operadores, pues la mortandad continúa y las listas ya no aparecen.
Asesinatos, que tienen su origen en la descomposición social que padecemos y alienta la ley del talión o del viejo oeste, según sea el caso o la situación lo amerite. Incluso, hasta el Fuente Ovejuna como sucede en Puebla, Oaxaca y otros estados del país.
Nada aprendimos de aquella terrible historia de San Juan Ixtayopan, en la delegación Tláhuac en 2004, cuando habitantes de la región lincharon a tres agentes federales: Víctor Mireles Barrera, Cristóbal Bonilla Colín y Édgar Moreno Nolasco; los dos primeros fueron quemados vivos y el tercero fue rescatado por policías judiciales.
Investigaban asuntos relacionados con la venta de droga en una escuela primaria de la zona, cuando fueron descubiertos y agredidos por una turba.
Gente fuera de control, que rebasa a la autoridad y se hace justicia por propia mano, como sucedió, hace unos días, en Puebla, en el municipio de Ajalpan, donde sus pobladores confundieron a dos encuestadores universitarios con presuntos secuestradores, y “una turba los golpeó hasta dejarlos inconscientes, para más tarde prenderles fuego”.
Un acto de impunidad y barbarie sin freno. Dos vidas pérdidas por una “confusión”. Dos familias en duelo por la sinrazón. Autoridades omisas, cómplices de estos crímenes.
Estamos en un momento de crisis que demanda más acciones que discursos. Militarizar al país, colocar un policía en cada esquina no es suficiente y tampoco efectivo. La descomposición del tejido social exige algo más que el uso superior de la fuerza.
La famosa apología del crimen organizado tiene un robusto auditorio en las nuevas generaciones que desconfían del gobierno y rechazan a las instituciones. Más de 30 millones de mexicanos, jóvenes de entre 15 y 29 años de edad, que buscan una oportunidad y un reconocimiento social.
Una deuda histórica que ahora el PRI busca saldar con la creación de la: “Ley General para el Desarrollo Integral de los Jóvenes”, pues como reconoció el senador René Juárez Cisneros, son un sector vulnerable, ya que ocho millones viven en pobreza extrema; y los que cuentan con empleo, más del 60 por ciento lo hace de manera informal y perciben entre uno y tres salarios mínimos, y lo que es peor, el desempleo afecta aún más a aquellos con educación media superior como mínimo.
Un difícil panorama, como señalábamos, que reclama políticas y programas orientados a resolver sus problemas, de educación, cultura, salud, vivienda, trabajo; así como la creación de un marco jurídico que favorezca los derechos de los jóvenes.
Retrasar su atención sólo favorece el caldo de cultivo en que se ha convertido el territorio nacional, que vive desde hace años una ola de violencia por las feroces disputas entre cárteles narcotraficantes y los ataques de estos grupos a la población civil.
Historias que alcanzan niveles de indignación por la inseguridad y la corrupción. ¿En qué momento perdimos al país?
Vericuentos
Primera llamada
La fiesta de la sucesión comenzó en Guerrero a ritmo de bala, muertos y heridos dándole la bienvenida al poder a Héctor Astudillo, el priísta que recuperó la entidad luego de 12 años de gobiernos perredistas que concluyeron con la triste noche de Iguala.
Astudillo llega a liberar a Rogelio Ortega de la responsabilidad de gobernar que hasta julio pasado lo asfixiaba y llevó al senador Rene Juárez Cisneros a recordarle que Guerrero no es Disnelayndia. Aunque lo niega el mandatario electo, sabe que es primera, primera llamada.
Colima TEPJF
El ambiente político en Colima no es apto para cardíacos, el dictamen que en breve se dará conocer sobre la impugnación que presentó el panista Jorge Luis Preciado, por el resultado de las elecciones para gobernador. Mantiene en vilo a su contrincante, priista José Ignacio Peralta, ya que el blanquiazul amenaza con la resistencia civil y no dejarlo gobernar. Las acciones incluyen el bloqueo al Puerto de Manzanillo. Ya veremos.
Agenda
A contrarreloj trabajan en el Senado, la agenda legislativa tiene pendiente aprobar la Nueva Ley de Ejecución Penal, atención a víctimas, desaparición forzada, el sistema anticorrupción y las leyes secundarias en materia de transparencia, el combate al robo de hidrocarburos, entre otras y claro, la polémica sucesión en la Suprema Corte de Justicia. Todo un reto para la experiencia y habilidad del priista Emilio Gamboa Patrón, que cabildea con sus pares.
@guillegomora