Carlos Slim, el hombre más rico de México y América Latina, reafirmó su confianza en el futuro del país y respaldó la estrategia económica del gobierno de Claudia Sheinbaum. Durante una conferencia de prensa este lunes, el empresario abordó la historia de sus negocios, sus planes de inversión y las perspectivas económicas de México.
Slim advirtió que las amenazas arancelarias de Donald Trump no resolverán los problemas económicos y, por el contrario, podrían generar mayor inflación. Sin embargo, confía en que las tarifas solo afectarán a ciertos sectores, como el acero y el aluminio, sin impactar el 80% de las exportaciones mexicanas. Además, destacó la actitud de “cabeza fría” de Sheinbaum ante la presión externa.
El magnate, con una fortuna estimada en más de 80,000 millones de dólares, insistió en que la inversión es clave para el crecimiento económico y enfatizó la importancia de fortalecer el comercio con EE. UU. Respaldó los objetivos del Plan México, que busca elevar la inversión pública y privada, particularmente en infraestructura, energía y telecomunicaciones. “Hay una gran necesidad de inversión en CFE y en el sector petrolero”, afirmó, señalando que Grupo Carso está listo para contribuir.
En defensa de su papel en el sector de telecomunicaciones, Slim rechazó las acusaciones de monopolio y recordó que, tras la compra de Telmex en los noventa, invirtió más de 8,000 millones de dólares para modernizarla. También criticó la falta de independencia del IFT, órgano regulador que está en proceso de extinción.