Cuatro días después de asumir su segundo mandato, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dio luz verde al restablecimiento de los vuelos de deportación de migrantes, según confirmó la nueva secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, a través de redes sociales.
En un mensaje publicado en X (antes Twitter), Leavitt afirmó: “Han comenzado los vuelos de deportación. El presidente Trump está enviando un mensaje fuerte y claro al mundo entero: si ingresa ilegalmente a los Estados Unidos de América, enfrentará severas consecuencias”.
Uno de estos vuelos partió del aeródromo del Ejército Biggs, en Fort Bliss, El Paso, Texas, con destino a Guatemala. La aeronave transportaba aproximadamente 80 personas, aunque no se especificaron detalles sobre los pasajeros.
En el marco de estas acciones, el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) detuvo, en solo 33 horas entre el 21 y 22 de enero, a más de 460 migrantes indocumentados. Las personas detenidas enfrentan cargos por delitos como agresión sexual, robo, asalto agravado, delitos relacionados con drogas y armas, violencia doméstica y resistencia al arresto.
Leer más: Trump ordena despliegue de militares a la frontera con México
Entre los arrestados hay ciudadanos de 15 países, incluyendo México, Guatemala, Honduras, Venezuela, y Afganistán. Además, el jueves, agentes de ICE llevaron a cabo operativos en un mercado de pescado en Newark, Nueva Jersey, donde detuvieron a varios trabajadores.
Estas medidas forman parte de la estrategia del gobierno de Trump para endurecer las políticas migratorias, enviando una señal de tolerancia cero hacia quienes ingresen ilegalmente al país.