Patricia Aguayo, vocera de los trabajadores del poder judicial, en entrevista con José Cárdenas, expresó que la decisión del Consejo de la Judicatura Federal (CJF) de no frenar la implementación de la reforma judicial sienta un mal precedente porque manda un mensaje para que ya nadie respete las suspensiones de los jueces de distrito y magistrados de circuito. La vocera también afirmó que el consejero de la CJF, Sergio Javier Molina Martínez, «se quitó la máscara» y se puso del lado del Gobierno al votar en favor de desacatar las suspensiones contra la implementación de la reforma. Señaló que es una incongruencia que el CJF desacate suspensiones de amparo, sobre todo porque formó y autorizó los nombramientos de los juzgadores que emitieron esas medidas cautelares. Afirmó que el CJF hasta el momento no ha cumplido con las demandas que le han hecho los trabajadores sobre el respeto a sus salarios y prestaciones, y su postura hace más difícil tenerle confianza.