El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, dijo que las fuerzas defensivas ucranianas protagonizan intensas batallas en la región nororiental de Járkov, donde miles de personas fueron evacuadas tras el comienzo de una ofensiva ordenada por el régimen ruso, que ha logrado éxitos en pueblos fronterizos escasamente habitados.
«Las batallas defensivas y los encarnizados combates continúan en gran parte de nuestra frontera», dijo el jefe de Estado, añadiendo que algunas aldeas «de hecho pasaron de ser una ‘zona gris’ a una zona de combate». Zelenski también apuntó que había renovados combates en el frente suroriental, específicamente en la región de Donetsk.
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Por su parte, el gobernador de la región de Járkov, Oleg Sinegubov, escribió en sus plataformas en redes sociales que «todas las zonas de la frontera norte están bajo fuego enemigo casi las 24 horas del día. La situación es difícil». La autoridad añadió que «el número de localidades donde hay hostilidades activas ha aumentado”.
El comandante en jefe de las fuerzas ucranianas, Oleksandr Syrsky, aseguró que «los intentos de romper nuestras defensas fueron detenidos», pero admitió que la situación se había «degradado significativamente» y que los invasores habían conseguido algunos «éxitos parciales”. Las fuerzas ucranianas «hacen todo lo posible para mantener sus líneas de defensa e infligir daños al enemigo», declaró.
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Las autoridades de Kiev llevaban semanas advirtiendo que Moscú podría intentar atacar las regiones fronterizas del noreste, mientras Ucrania sigue esperando la llegada de ayuda occidental y sufre de una escasez de soldados. Esta misma jornada, Rusia reivindicó la conquista de otras cuatro localidades cercanas con la frontera -Gatiche, Krasnoye, Morokhovets y Oleynikovo-, en la región de Járkov. Esto no ha sido confirmado de manera independiente.