Cuatro palestinos murieron y más de 200 resultaron heridos al enfrentarse con militares israelíes ayer al prolongarse el malestar provocado por el anuncio del presidente estadounidense Donald Trump de reconocer a Jerusalén como la capital de Israel.
Luego de las oraciones del viernes, grupos de palestinos incendiaron neumáticos y arrojaron piedras a los soldados, que respondieron con gases lacrimógenos y munición de guerra en Cisjordania y la frontera con Gaza.
El vocero del Ministerio de Salud de Gaza, Ashraf al-Kidra, dijo que los palestinos sufrieron heridas durante choques en dos puntos de la frontera del territorio con Israel.
El Dato: Hamas, que gobierna en la Franja de Gaza, convocó a una insurreción contra el gobierno de Donald Trump.
Agregó que dos hombres fallecieron por disparos en la cabeza y que cinco de los lesionados están graves. Uno de los muertos fue identificado como Ibrahim Abu Thraya, de 29 años, un hombre discapacitado que tenía ambas piernas amputadas.
La policía israelí dijo además que un palestino fue herido a tiros tras apuñalar a un agente en Ramalá, Cisjordania.
El vocero Micky Rosenfeld dijo que el agente sufrió heridas moderadas. El agresor fue evacuado por la Media Luna Roja y se desconocía su estado.
La policía investiga denuncias de que el palestino llevaba un chaleco explosivo o portaba un artefacto explosivo falso, dijo Rosenfeld.
Otra de los abatidos fue un hombre de 29 años que resultó herido en el pecho por balas de las fuerzas israelíes durante enfrentamiento registrados en la ciudad de Anata, en Cisjordania.
En la Franja de Gaza, los soldados israelíes abatieron a dos palestinos y lesionaron a cientos durante enfrentamientos que estallaron a lo largo de la frontera entre el sitiado enclave e Israel.
Los choques se han sucedido desde que Trump reconoció a Jerusalén como capital de Israel la semana pasada.
La milicia Hamas, que gobierna Gaza, ha convocado a una nueva insurrección armada contra Israel en respuesta a la declaración de Trump.
Con su anuncio, Trump se apartó de la posición estadounidense que sostuvo durante décadas que el estatus de Jerusalén se debía resolver en negociaciones. Las protestas se han multiplicado en países árabes y musulmanes de la región.
En Jerusalén oriental hay sitios sagrados judíos, cristianos y musulmanes, y el estatus del lugar es el centro del conflicto. Los palestinos reclaman Jerusalén oriental, del que Israel se apoderó en la guerra del Medio Oriente en 1967, como la capital de su futuro estado. Israel dice que toda la ciudad es su capital.
Fuente: La Razón