La asediada comediante Kathy Griffin dice que no le teme a Donald Trump y que planea seguir burlándose de él, aunque afirmó que lamenta haber publicado una imagen que la muestra sosteniendo lo que parece ser una cabeza decapitada y ensangrentada del presidente estadounidense.
En una conferencia de prensa, Griffin pronosticó entre lágrimas el fin de su carrera y dijo que Trump la “quebró”. Desde que publicó el video el pasado martes, perdió su trabajo como presentadora del especial de Año Nuevo de CNN y cinco teatros cancelaron sus shows de comedia. Trump, la primera dama Melania Trump y Donald Trump Jr. han criticado el video.
Griffin, quien aseveró que había sido contactada por el Servicio Secreto, dijo que los Trump están “tratando de arruinar mis derechos para siempre”.
Oficiales de la Casa Blanca no respondieron a una solicitud de comentarios. La humorista de 56 años recalcó que el video era una parodia mordaz en respuesta a la declaración de Trump de que la presentadora Megyn Kelly “tenía sangre saliéndole por los ojos, saliéndole por todos lados”.
“No me voy a rendir por este tipo”, dijo en un momento desafiante.
“Seguiré haciendo chistes sobre este tipo”. El vocero del Partido Republicano Mike Reed calificó la rueda de prensa como un “intento desesperado” de cambiar la conversación. “La carrera de Kathy Griffin estaba acabada mucho antes de que intentara hacer un chiste asqueroso sobre decapitar al presidente”, dijo Reed. “Lo que hizo estuvo mal y el presidente Trump y su familia tienen todo el derecho de condenarlo”.
Griffin pareció sorprendida por la cantidad de cámaras. Las manos le temblaron cuando tomó agua. Pasó de arrepentida a combativa e intentó varios chistes nerviosos que hicieron reír a su abogada, Lisa Bloom.
Bloom dijo que su clienta, amparada por la Primera Enmienda de la Constitución sobre libertad de expresión, tenía derecho a burlarse del presidente de Estados Unidos.
Fuente: El Universal
1 comentario
No me puedo imaginar lo que sintió el niño Barron Trump cuando creyó ver que la cabeza decapitada era la de su papá. Con todo, tienen razón quienes defienden el derecho a la libre expresión. Pero el otro lado de la moneda es la responsabilidad por las consecuencias de ese ejercicio libre. Creo que ahí Melania tiene derecho a demandar. Si hay demanda, va ser interesante ver como resuelve la justicia norteamericana.