«Amnistía Internacional hace un llamado a que las autoridades venezolanas investiguen de forma inmediata las denuncias de tortura realizadas por el prisionero de consciencia Leopoldo López, el día 23 de junio de 2017», dijo la organización en un comunicado divulgado en Caracas.
Asimismo, pidió a las autoridades de la cárcel donde está recluido López cesar «cualquier acto que ponga en riesgo la integridad física, psicológica» y su vida, y además que se permita «inmediatamente la constatación de su situación» por parte de la Fiscalía, sus familiares y abogados.
Lilian Tintori, esposa de López, difundió este 23 de junio un vídeo en el que el opositor grita «me están torturando» desde dentro de la cárcel militar de Ramo Verde, donde se encuentra detenido desde 2014 cumpliendo una condena de casi 14 años. «Lilian, me están torturando. ¡Denuncien, denuncien! Lilian, denuncia», grita López a Tintori según se escucha en imágenes grabadas desde las cercanías de la prisión, ubicada a las afueras de Caracas.
Horas después de que se difundiera el audiovisual de López, el periódico venezolano Últimas Noticias, un medio pro Gobierno de Nicolás Maduro, difundió en su sitio de internet fotografías y un vídeo que muestran al opositor encarcelado Leopoldo López, presuntamente, recibiendo atención médica y alimentos. Estas imágenes fueron difundidas en las redes sociales por Últimas Noticias bajo el título «Leopoldo López se encuentra bien», lo que sido interpretado por otros medios como «desmentido” de la tampoco verificada «tortura”.
Tintori también había denunciado el viernes que su marido llevaba 78 días sin acceso a sus abogados y responsabilizó de esta situación al presidente del país, Nicolás Maduro.
Por este hecho, el también primer vicepresidente del Parlamento, el opositor Freddy Guevara, acudió, en horas de la noche del viernes, junto a otros diputados y dirigentes del partido de López, Voluntad Popular (VP), hasta Ramo Verde y pidió a las autoridades «constatar el estado de Leopoldo de una fuente confiable».
El político de 46 años, declarado «preso de conciencia» por AI, fue condenado en septiembre de 2015 como responsable de los disturbios ocurridos al final de una marcha antigubernamental en 2014, en los que murieron tres personas.
Fuente: DW News