“Con cada respiración que tomo me siento como si fuera una nueva oportunidad en la vida”, bromeó Clinton. “No sé por qué dicen eso, creo que es parte de su absurda estrategia. A veces me siento como que esta campaña ha entrado en un universo alternativo”.
Tras ello el presentador la retó a abrir un frasco de encurtidos para demostrar su fuerza y salud, que lo hizo mientras pretendía que le costaba abrirlo.
Kimmel le preguntó a Clinton cómo se preparaba para los debates con su contricante Donal Trump. “Vi muchos de sus debates durante las primarias, y él [Donald Trump] insultó a todos sus oponentes, insultó a todos los moderadores e insultó al 80% de la población estadounidense y al resto del mundo”.
“Por un lado, los debates son una oportunidad seria para que los estadounidenses escuchen lo que propone cada uno y hagan una decisión. Así que me los tomo muy en serio. Pero tienes que estar preparada por las cosas raras que vengan hacia ti”.
Pero el tema de Donald Trump no terminó ahí, ya que el presentador le pidió a Hillary que leyera algunas citas reales que había dicho el magnate sin reírse. Algunas de las frases que leyó la nominada de 68 años fueron bromas pesadas insultando a Rosie O’Donnell.
Sin embargo, la ex secretaria de la nación no se atrevió a leer la famosa y controversial cita de Trump, donde afirmaba que si Ivanka Trump no fuera su hija, saldría con ella.
Mientras que las payasadas que ha hecho y dicho Trump en su campaña se han convertido en una excelente material para el comediante Kimmel, Clinton aseguró que preferiría enfrentarse con alguien digno para el trabajo.
“Yo preferiría ir contra un rival que esté calificado para ser presidente y sea apto para ser comandante en jefe”, admitió.
Fuente: Eme De Mujer