El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, presenta un deterioro clínico tras una compleja cirugía intestinal, según informó este jueves el equipo médico que lo atiende en el Hospital DF Star, en Brasilia. A casi dos semanas de la operación, su condición ha empeorado, lo que ha obligado a mantenerlo en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
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Los médicos señalaron que Bolsonaro, de 69 años, registra presión arterial elevada y alteraciones preocupantes en pruebas hepáticas, por lo que se le están practicando nuevos estudios de imagen para evaluar el avance de su estado.
La intervención quirúrgica a la que fue sometido el pasado 13 de abril tuvo una duración de 12 horas e incluyó la eliminación de adherencias intestinales y la reconstrucción de la pared abdominal. Esta fue, de acuerdo con el parte médico, la cirugía más compleja desde el apuñalamiento que sufrió en 2018 durante un mitin en plena campaña presidencial.
Desde aquel ataque, Bolsonaro ha requerido múltiples operaciones y hospitalizaciones frecuentes. En esta ocasión, su recuperación se ha visto complicada, y su alta médica sigue sin fecha definida. Por ahora, permanece con nutrición parenteral, en fisioterapia y bajo vigilancia para prevenir trombosis.