El Senado estadounidense confirmó a última hora del viernes a Pete Hegseth como Secretario de Defensa de la nación en una dramática votación de desempate, rechazando las preguntas sobre sus cualificaciones para dirigir el Pentágono en medio de acusaciones de consumo excesivo de alcohol y comportamiento agresivo hacia las mujeres.
Pocas veces un candidato al Consejo de Ministros se ha enfrentado a tantas dudas sobre su experiencia y comportamiento como Hegseth, sobre todo para un puesto de tan alto nivel en el Ejército estadounidense. Pero el Senado, liderado por los republicanos, estaba decidido a confirmar a Hegseth, un antiguo presentador de ‘Fox News’ y veterano de guerra que ha prometido traer una «cultura guerrera», completando así los altos cargos del Gabinete de seguridad nacional del presidente Donald Trump.
El vicepresidente JD Vance llegó para romper el empate 50-50, algo muy inusual para los nominados al Gabinete y, en particular, para los secretarios de Defensa, que normalmente obtienen un apoyo bipartidista más amplio. El propio Hegseth estaba en el Capitolio con su familia. «Tenemos un gran secretario de Defensa y estamos muy contentos», dijo Trump al subir al Air Force One tras inspeccionar la devastación causada por los incendios en California.
Trump dijo que no le importaba la disidencia del senador Mitch McConnell, el influyente exlíder republicano -que se unió a otros dos republicanos, la senadora Lisa Murkowski, de Alaska, y la senadora Susan Collins, de Maine, para votar en contra de Hegseth– porque lo «importante es ganar».
La capacidad del Senado para confirmar a Hegseth a pesar de una grave serie de acusaciones en su contra proporciona una medida del poder político de Trump y su capacidad para conseguir lo que quiere del Congreso liderado por el Partido Republicano, y de la potencia de las guerras culturales para alimentar su agenda en la Casa Blanca.
Solo una vez antes el vicepresidente ha tenido que desempatar en un nombramiento del Gabinete: durante el primer mandato de Trump, cuando el vicepresidente Mike Pence emitió el voto para confirmar a Betsy DeVos como secretaria de Educación.
Orígenes de las dudas por Hegseth
Hegseth se enfrentó a acusaciones de que agredió sexualmente a una mujer en una conferencia republicana en California, aunque él ha negado las afirmaciones y ha dicho que el encuentro fue consentido. Posteriormente pagó 53.000 euros a la mujer.
Más recientemente, la excuñada de Hegseth afirmó en una declaración jurada que éste maltrataba a su segunda esposa hasta el punto de hacerla temer por su seguridad. Hegseth ha negado la acusación y, en el proceso de divorcio, ni Hegseth ni la mujer afirmaron ser víctimas de malos tratos domésticos.
Durante una encendida audiencia de confirmación, Hegseth desestimó una por una las acusaciones de irregularidades y prometió llevar la «cultura del guerrero» al puesto más alto del Pentágono. Hegseth ha prometido no beber en el puesto si es confirmado.
Los senadores republicanos que se enfrentan a una intensa campaña de presión por parte de los aliados de Trump para apoyar a Hegseth se mantuvieron firmes en su nominación, haciéndose eco de sus afirmaciones de una campaña de «desprestigio» en su contra.
Quién es Pete Hegseth
Graduado en Princeton y Harvard, Hegseth representa a una nueva generación de veteranos que alcanzaron la mayoría de edad tras los atentados del 11 de septiembre de 2001. Hizo carrera en ‘Fox News’ como presentador de un programa de fin de semana, y era un desconocido para muchos en el Capitolio hasta que Trump lo eligió para el puesto más alto de Defensa.
Los comentarios de Hegseth de que las mujeres no deberían desempeñar ningún papel en el combate militar suscitaron especial preocupación, incluso entre legisladores que habían servido en el Ejército. Desde entonces ha matizado esas opiniones al reunirse con senadores durante el proceso de confirmación.
Murkowski afirmó en una extensa declaración antes de la votación de prueba sobre Hegseth que su comportamiento «contrasta claramente» con lo que se espera de los militares.
«Sigo preocupada por el mensaje que la confirmación del Sr. Hegseth envía a las mujeres que actualmente sirven y a las que aspiran a alistarse», escribió Murkowski en las redes sociales.
Hegseth dirigirá una organización con casi 2,1 millones de militares, unos 780.000 civiles y un presupuesto de 809.000 millones de euros.
En el ejercicio de su papel de asesoramiento y consentimiento sobre los candidatos de Trump, el Senado también está tratando de evitar su sugerencia de que los líderes del Partido Republicano simplemente eliminen el proceso de confirmación por completo, y le permitan nombrar a sus candidatos para el Gabinete cuando el Congreso esté en receso.
TE PUEDE INTERESAR: