El equipo de transición del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó este viernes que la ceremonia de investidura, programada para el próximo lunes, será trasladada al interior de la rotonda del Capitolio. La decisión responde a las bajas temperaturas extremas previstas y a preocupaciones relacionadas con la seguridad de los asistentes y las fuerzas del orden.
Leer más: Programa preliminar de toma de posesión de Trump: Ariel Moutsatsos #Colaboración
Según datos meteorológicos, las temperaturas para el lunes oscilarán entre los 6 °F y 20 °F (aproximadamente de -14 °C a -6 °C), lo que podría convertirla en una de las investiduras más frías desde 1985, cuando la ceremonia de la reelección de Ronald Reagan se llevó a cabo con -7 °F (-21 °C) y se canceló el desfile inaugural.
En su red Truth Social, Trump explicó que la ceremonia se celebrará de manera “muy bonita” y con una gran cobertura televisiva, ya que los invitados serán trasladados al Capitolio para el acto oficial. El presidente electo también destacó que una “explosión ártica” afecta a gran parte del país y expresó su preocupación por la seguridad:
“No quiero ver gente herida o lastimada de ninguna manera”, señaló, refiriéndose al impacto del frío extremo en los miles de simpatizantes que planeaban asistir al evento al aire libre en el National Mall.
A pesar del cambio, el mandatario electo adelantó que el domingo se realizará un mitin cubierto en el Capital One Arena, en Washington D.C. Durante este evento se proyectará en pantallas gigantes la ceremonia oficial del lunes, y tras prestar juramento, Trump se unirá a los asistentes para participar en un desfile presidencial.
Sin embargo, la decisión de modificar los planes no ha sido bien recibida por todos. Algunos seguidores de Trump, como Ken Robinson, proveniente de Oklahoma, expresaron su decepción:
“Vinimos hasta aquí para verlo en persona. (…) No es lo mismo verlo en un Jumbotron”, declaró a la cadena NBC.
Otros, como Harry Troyer, insistieron en que el frío no debería ser un impedimento:
“El frío no hace daño a nadie”.
A pesar de las críticas, Trump enfatizó que la comodidad y seguridad de los asistentes sigue siendo su prioridad.