La semana pasada el Banco de México decidió por mayoría elevar la tasa de referencia en 50 puntos base (0.50 puntos porcentuales) a 7.00 por ciento, como era ampliamente esperado. No obstante lo anterior, lo más interesante fue el resultado de la votación de la Junta de Gobierno (4-1), la revisión de las proyecciones de inflación al alza y el ‘tono’ del comunicado que acompañó la decisión de política monetaria. En cuanto al cambio en el ‘tono’ del comunicado, cabe destacar un enunciado que incorporó la Junta de Gobierno en el último párrafo, que dice: “Ante un panorama más complejo para la inflación y sus expectativas se considerará actuar con mayor contundencia para lograr el objetivo de inflación”. Así, en lo que resta de este espacio comentaré lo que considero que significa “contundencia” en el contexto de política monetaria en la compleja coyuntura actual.
Por el lado de la votación, a diferencia de la reunión del pasado 24 de marzo en la que la decisión fue unánime, en esta ocasión la Subgobernadora Irene Espinosa votó por un incremento de 75 puntos base (pb). En la minuta que se publicará el próximo 26 de mayo conoceremos las razones por las cuáles la Subgobernadora Espinosa tomó esta decisión. Sin embargo, tomando en cuenta los comentarios que hizo en el marco de la reunión anual de primavera del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, considero que puedo identificar la opinión de la Subgobernadora en la minuta de la reunión del 24 de marzo, en donde destaco lo siguiente: “…añadió que no actuar con rapidez y contundencia puede requerir en el futuro tasas reales más elevadas, y por más tiempo, lo que elevaría el costo en términos de producción y empleo”. Este es el único comentario en la minuta que incorpora la palabra “contundencia”. La subgobernadora llevó a cabo dicho comentario en el siguiente contexto: “…argumentó que no se ha logrado el efecto deseado sobre la tasa real debido a la subestimación sistemática de la inflación, llevando a tasas reales menores a las necesarias” y “…consideró que dado el balance de riesgos para la inflación, el riesgo de mayor apretamiento monetario a nivel global y el posible impacto del conflicto geopolítico en los mercados, se podría requerir modificar el ritmo de ajuste de la tasa de referencia”. En mi opinión, la Subgobernadora ya nos había advertido desde la reunión anterior que votaría por acelerar el ritmo de alza de tasas si tenían que revisar sus proyecciones de inflación al alza una vez más, dado que implicaría una previa subestimación de las mismas.
El staff del Banco de México revisó significativamente sus proyecciones para la inflación general de 2022 al alza (Promedios trimestrales – 2T: 6.9 a 7.6 por ciento; 3T: 6.1 a 7.0 por ciento; y 4T: 5.5 a 6.4 por ciento). Sin embargo, con excepción del primer trimestre de 2023, el staff dejó las proyecciones para el año que entra prácticamente sin cambio. La revisión de la trayectoria pronosticada de la inflación subyacente fue muy similar. En este sentido, el Banco de México continúa anticipando que la convergencia de la inflación hacia el objetivo de 3.0 por ciento se llevará a cabo en la segunda mitad de 2023.
Así, en mi opinión, mayor “contundencia” para la Subgobernadora Espinosa efectivamente significa elevar el ritmo de alza de tasas. Creo que al incorporar la palabra “contundencia” en el comunicado, pero sin haber efectivamente elevado la tasa en 75pb, la Junta de Gobierno manda un mensaje de que están dispuestos a acelerar el ritmo de alza de tasas si es necesario. En mi opinión, esto ocurriría si: (1) el Banco de la Reserva Federal de los Estados Unidos (Fed) eleva la tasa de Fed Funds en 75pb en alguna de las siguientes decisiones de política monetaria, en lugar de 50pb como se anticipa actualmente; (2) el Banco de México tiene que volver a revisar sus proyecciones de inflación significativamente al alza o inclusive pospone la fecha en la que la inflación convergerá al objetivo de 3.0 por ciento; o (3) el peso se deprecia significativa y rápidamente frente al dólar. Sin embargo, no me queda claro que para toda la Junta de Gobierno “contundencia” signifique lo mismo. Otra forma de explicar el significado de “contundencia”, en mi
opinión, aun si Banxico continúa con ritmo actual de alza de tasas (50pb), es si la Junta de Gobierno de Banxico decide continuar elevando la tasa de referencia más allá del nivel de 8.25 por ciento, en donde el consenso de analistas, así como algunos miembros de la Junta de Gobierno han expresado que es un ‘buen nivel’ para ‘desacoplarse’ de las acciones que llevará a cabo el Fed. Esto no solo se debe a que Banxico inició su ciclo de alza de tasas en junio del año pasado, mucho antes que el Fed y que, a diferencia de muchos bancos centrales, no disminuyó de manera tan significativa la tasa de referencia en el ciclo de baja de tasas, sino que 8.25 por ciento ha sido el nivel más alto que ha observado la tasa de referencia desde que el Banco de México hizo el cambio oficial de su instrumento de política monetaria de ‘el corto’ a la tasa de referencia, en 2008. En mi opinión, considero que es más factible que la Junta de Gobierno de Banxico eleve la tasa de referencia más allá del 8.25 por ciento -en incrementos de 50pb-, a que se acelere el ritmo de alza de tasas a 75pb.
Twitter: @G_Casillas
* El autor es Economista en Jefe para Latinoamérica del banco Barclays y miembro del Comité de Fechado de Ciclos de la Economía de México.