Enfrentándose a la oposición más firme de la comunidad médica japonesa a los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020, el presidente del COI, Thomas Bach, se ofreció a tener personal médico adicional disponible para ayudar cuando arranquen las competencias en poco más de nueve semanas.
Bach dio pocos detalles durante su intervención en remoto en una cumbre de tres días entre el Comité Olímpico Internacional y organizadores locales. Señaló que la ayuda llegará de varios comités olímpicos nacionales y estará disponible en las villas olímpicas y en las sedes deportivas.
En su discurso de 12 minutos, Bach garantizó a la población japonesa y a los deportistas que viajarán a Tokio que el COI celebrará unos Juegos “seguros” en medio de la pandemia.
“Por razones obvias, todavía no podemos darles (a los deportistas) todos los detalles, pero el principio más importante está muy claro: la Villa Olímpica es un lugar seguro y los Juegos Olímpicos y Paralímpicos se organizarán de forma segura”, apuntó Bach.
El dirigente alemán dijo que espera que más del 80 por ciento de los que se alojarán en la Villa Olímpica estén vacunados para entonces. Según reportes locales, la delegación olímpica japonesa empezará a vacunarse en junio.
Entre 1 y 2 por ciento de la población japonesa está totalmente inmunizada contra el Covid-19, y es poco probable que todos los ancianos reciban las dos dosis antes de que terminen los Juegos el próximo 8 de agosto.
Está previsto que la cita olímpica arranque el 23 de julio y la paralímpica el 24 de agosto. Su celebración es un imperativo financiero para el COI, ya que el 73 por ciento de sus ingresos proceden de la venta de los derechos televisivos y otro 18 por ciento de los patrocinios.
Japón ha invertido oficialmente 15 mil 400 millones de dólares en la organización, aunque auditorías gubernamentales sugieren que la cifra es mucho mayor.
Fuente: Marca Claro