Las medidas de distanciamiento social, para evitar contagios de COVID-19, serán obligatorias a partir de mañana en Jalisco, anunció hoy el gobernador Enrique Alfaro y advirtió que para que se cumpla la nueva disposición se hará uso de la fuerza pública.
“Quien no las cumpla será sancionado, la fuerza pública tendrá la encomienda de hacerlas cumplir. No es justo que los que sí están acatando estas medidas paguen por quienes no lo hacen”, dijo en un video.
Agregó que las disposiciones son las mismas más una nueva: el uso de cubrebocas obligatorio al salir de casa y afirmó que su gobierno repartirá algunos en diversos puntos del estado, sin embargo, se pueden usar caseros.
Alfaro detalló que las medidas siguen siendo las mismas: salir a lo estrictamente necesario, sólo pueden operar los negocios definidos como esenciales y que las personas en riesgo no salgan.
“Sólo pueden funcionar las actividades económicas esenciales, no podrá haber eventos, reuniones o congregaciones de más de 50 personas y queda prohibido el uso de espacios públicos como unidades deportivas, plazas y jardines municipales”, dijo.
También informó que en las entradas a su entidad habrá filtros que vigilen que no ingresen ni salgan personas enfermas.
“Tendremos particularmente atención en los puntos de ingreso de quienes vienen del Valle de México”, manifestó.
En su mensaje, argumentó que en la última semana, el aislamiento ha estado por debajo de lo esperado y su nivel de eficacia fue menor al 40 por ciento durante el periodo vacacional.
“Los efectos de estos actos de irresponsabilidad, se verán reflejados a finales de este mes en el número de contagios y, tristemente, en el número de muertes. El costo de haber aflojado el ritmo podría ser enorme”, adelantó.
También anunció que los resultados de estas nuevas medidas de aislamiento serán evaluados el 16 de mayo y que su gobierno ya trabaja en un plan de retorno a la “nueva normalidad” y de reactivación económica que dará a conocer en los próximos días.
Fuente: La Razón