El robo de combustible a Petróleos Mexicanos (Pemex) causa pérdidas por 30 mil millones de pesos al año, reconoció este martes Carlos Treviño, director general de la empresa productiva del Estado.
“La estimación que tenemos es del orden de 30 mil millones de pesos”, indicó el directivo en entrevista con José Cárdenas. “Pemex es víctima de este flagelo”.
Treviño añadió que, aunque la estrategia no ha funcionado en su totalidad, al cierre de 2017 se detuvo a mil 600 personas realizando robos in fraganti; se han recuperado 14 millones de litros robados y han resguardado 6 mil 600 vehículos.
Como parte de la estrategia de Pemex ante la ordeña, señaló, se han escoltado a pipas, además de que se han cerrado aproximadamente 100 estaciones de servicio que han mostrado inconsistencias.
En su opinión, las tomas clandestinas no sólo agravan la situación de la empresa, sino también en los lugares en los que se presenta. Detalló que aquellos estados donde hay mayor cantidad de ductos, tales como Puebla, Hidalgo y Guanajuato, son los que mayores ordeñas presentan.
“En el contexto no es tan mala noticia, porque quiere decir que tenemos ayuda de los municipios, de la población, estados y más fuerzas federales para detectarlas e irlas a tapar; a veces se interpreta mal el dato de tomas clandestinas”, finalizó.