Donald Trump ha vuelto a ser protagonista «indirecto» en un acto oficial de Estado al tararear el himno de Estados Unidos mientras danzaba al son de la música. Ocurrió ayer en el Cementerio Nacional de Arlington (Virginia) —ubicado en las proximidades de la Casa Blanca— en el transcurso de la celebración del Día de los Caídos, que se conmemora el último lunes de mayo en recuerdo a los soldados estadounidenses que murieron en combate. La grabación del momento, que pronto fue criticado en las redes sociales, se dio en la apertura de la ceremonia en la que se pudo observar cómo el presidente republicano comenzó a moverse con la mano en el pecho y a tararear el himno al poco de comenzar la canción.
Algunos usuarios en Twitter especularon con la «mala memoria» del presidente republicano al advertir que, en varios momentos de la melodía, Trump paraba de cantar la letra. Otros, directamente, le afearon su conducta y la pose que mantuvo durante el acto solemne al moverse continuamente en comparación con los otros funcionarios (a su lado se encontraba el actual Secretario de Defensa James Mattis) y miembros del Ejército que, hieráticos y sin mover los labios, escucharon de principio a fin el himno con la seriedad que suele rodear a este tipo de acontecimientos.
Esta vez, Melania no pudo sacar del apuro al mandatario, que ya se vio en entredicho el pasado abril cuando se le olvidó ponerse la mano en el pecho al escuchar el himno en el primer gran evento social que la familia presidencial hizo en la Casa Blanca, con motivo de la celebración del Lunes de Pascua.
Fuente: El País