Los mexicanos estamos a tiempo de reconstruir «sin violencia, sin odio y sin corrupción» una patria nueva, libre y democrática, sostuvo Andrés Manuel López Obrador.
Al visitar por tercera ocasión suelo estadunidense en lo que va de este 2017 y encontrarse con varios cientos de mexicanos migrantes radicados en El Paso, Texas, el excandidato presidencial convocó a los paisanos a «seguir luchando» para combatir la «insidia racista» y alcanzar, entre todos, una patria que los represente y los defienda dentro y fuera del territorio nacional.
«Podemos reconstruir un país que defienda con dignidad a sus ciudadanos en el exterior y podemos sobre todo rediseñarlo para erradicar las carencias que expulsan y destruyen a sus ciudadanos, debemos transformar la zozobra y el dolor que aquejan a esta frontera en una zona limítrofe, próspera y pacífica, el futuro de México está en nuestras manos», manifestó.
Desde el centro de la ciudad texana en la Plaza San Jacinto -conocida en el pasado como Plaza Lagartos, por existir reptiles en esa zona- exhortó a los paisanos a defender con argumentos el derecho al trabajo y a terminar con el «disparate» de que los mexicanos son el enemigo de los ciudadanos estadunidenses, como lo afirma el presidente Donald Trump.
En ese sentido, consideró relevante convencer a los estadunidenses de que la situación económica que enfrentan no es por culpa de los migrantes sino, como sucede en México, por los malos gobiernos que mantienen privilegios y una mala distribución del ingreso.
Fuente: Excélsior