Pasaron seis meses para que Axel Rose, Slash, Duff McKagan y Dizzy Reed regresaran a la capital del país, acompañados por la tecladista Melissa Reese, el baterista Frank Ferrer y el guitarrista Richard Fortus, quienes hicieron cimbrar el Domo de Cobre con los éxitos que los hicieron famosos a finales de los 80.
Algo que parecía imposible sucedió de nuevo, la banda de las pistolas y las rosas reunieron a 17 mil asistentes con su gira Not in this lifetime, desde el primer momento que sonó el intro de los Looney Tunes y salieron a escena cada uno de los miembros originales de Guns N’ Roses los gritos no se hicieron esperar, «Ciudad de México, Guns and Roses», dijo Axel Rose para calmar y hacer olvidar al público más de una hora de retraso.
Los primeros acordes de «It’s So Easy» eran tan ensordecedores que de inmediato conectó con los asistentes quienes hicieron temblar la pista y gradas del Palacio de los Deportes, los vasos de cerveza volaron por los cielos cuando Axel con su peculiar timbre de voz interpretó «Mr. Brownstone»; el sudor de la gente que los esperaba desde las 19:00 horas para tener un mejor lugar empezaron a empapar poco a poco las playeras negras con la ilustración clásica del Appetite for Destruction, álbum que fue lanzado en el verano del 87.
Con un escenario sencillo y más pequeño al de abril pasado y sin la silla que acompañaba a Rose en aquel momento los californianos día a día han mostrado que siguen vigentes después de tres décadas de trayectoria, Guns N’ Roses ha sido una banda que siempre ha estado presente en el público mexicano, hay que recordar que antes de la reunión de los miembros originales pisaron tierra azteca en 2011 y en 2007 promocionando su controvertido Chinese Democracy, y es justo de este álbum que Slash y Duff durante esta gira han interpretado «Chinese Democracy», sencillo que le da nombre al quinto (no estoy seguro si el quinto) álbum de la banda.
Con la energía a tope durante los primeros minutos, Axel quien llevaba un sombrero negro, una camisa de cuadros negra sobre la cintura pregunto si «esta es la jungla» inmediatamente Slash hizo sonar los primeros acordes de «Welcome to the Jungle», una de las canciones más emblematicas de la banda y tema que volvió a desatar la locura en el recinto, haciendo vibrar cada butaca del lugar con el coro (aquí va coro de la canción).
Dando un pequeño respiro al público la banda bajo de intensidas para tocar «Better», «Double Talkin’ Jive» donde Slash mostró sus dotes como guitarrista haciendo sonar un solo de guitarra que erizaba la piel, a esto siguió «Estranged» del disco Use Your Illusion vol II donde Slash (nombre completo de Slash) seguía dando catedra con su guitarra.
Con el hambre que tenían desde hace 30 años cuando tocaban en los bares caifornianos en 1986, Slash sigue dando muestra de sus poderosos solos de guitarra, que haciendo mancuerna con la voz de Axel, el bajo de Duff y el teclado de Dizzi Reed, no dejaban respirar a un público mexicano que estaba extasiado con cada uno de los acordes de «Live and Let Die» que encendió el escenario con juegos pirotécnicos, además de poner a cantar a todo el público, para después hacer sonar la controvertida “Rocquet de queen” y sin dar tregua Duff se para enfrente del escenario para hacer vibrar el bajo a ritmo de «You Could Be Mine».
Un contento Axel Rose sale del escenario para dejar al mando al bajista Duff McKagan para interpretar «Attitude», cover a los padres del horror punk Misfits, a este tema continuaron «This I Love» y «Used to Love Her».
Fuente: Crónica