La oposición venezolana abrió una nueva etapa de movilizaciones en las calles (las próximas, el 7 y 14 de setiembre) para forzar al poder electoral a organizar un referendo revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro, animada por la multitudinaria marcha de este jueves.
La MUD reclama al Consejo Nacional Electoral (CNE) -al que acusa de chavista- que fije la fecha de recolección de cuatro millones de firmas necesarias para convocar el referendo.
“Mostramos al mundo el tamaño inmenso de la Venezuela que quiere cambio. Es una marcha histórica. Hoy es el inicio de la etapa definitiva de esta lucha”, afirmó desde una tarima el vocero de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Jesús Torrealba.
La manifestación del 7 de setiembre se realizará ante la sede de poder electoral, la del 14 en las capitales de los estados, y para la noche de este jueves se hizo un llamado a un toque nacional de cacerolas.
Vestidos de blanco, ondeando banderas y gritando “Cambio” y “Revocatorio ya”, cientos de miles de opositores marcharon, según cálculos de medios de prensa, en lo que llamaron la “Toma de Caracas”. “Hay mucha hambre, desesperanza, amenazas. Queremos un cambio”, dijo a la AFP Alba Zárate, de 39 de años.
En la mayor pulseada que libraron en las calles en los últimos dos años, Maduro respondió con una masiva concentración de seguidores ataviados de camisetas rojas, en el centro de Caracas, en lo que bautizaron como la “Toma de Venezuela”.
“Hoy derrotamos un golpe de Estado (…), han fracasado una vez más, la victoria es nuestra”, dijo desde la tarima el presidente socialista, quien calculó entre “25.000 y 30.000” los participantes en la manifestación opositora.
Marcha y contramarcha se realizaron sin incidentes, pero en el cierre de la manifestación opositora un grupo de encapuchados lanzó piedras y bloqueó una estratégica vía que conecta el este con el oeste, ante lo que la policía y guardia militarizada respondió con gases lacrimógenos.
Fuente: Exitosanoticias.pe