El nadador estadounidense Michael Phelps ganó este sábado su última competencia en los Juegos Olímpicos de Río 2016, los 4×100 combinados.
Phelps nadó junto con sus compatriotas Ryan Murphy, Cody Miller y Nathan Adrian, quienes pararon el cronómetro en 3:27:95, lo que se traduce en récord olímpico.
Con este resultado, el Tiburón de Baltimore sumó su medalla de oro número 23 en Juegos Olímpicos.
Así fue lo último de Michael Phelps en Juegos Olímpicos. Simplemente, ¡GRACIAS! #Rio2016EnDIRECTV. pic.twitter.com/y6xls3ODQs
— Sebastián Decker ? (@SebasDecker) August 14, 2016
No todo ha sido felicidad para el deportista más galardonado de la historia olímpica. Michael es hijo de padres divorciados, muy tímido y, desde pequeño, expresó su fortaleza mental en el agua
Después de Beijing, se produjo el derrumbe al que siempre estuvo propenso.
Fue fotografiado fumando mariguana, costándole una enorme sanción y así fue como el gigante quebró.
Se distanció de su entrenador, Bob Bowman, a quien conoce desde los 11 años.
A Londres acudió por pura rutina, empujado por el miedo a dejar el deporte que le había dado sentido a su vida. Al finalizar la justa olímpica, Phelps casi entró en depresión al caer en una espiral de autodestrucción.
El agua era lo único que podía salvarlo y devolverle el equilibrio, de la misma forma que lo había hecho en su niñez.
En Río de Janeiro desafió récords y medallas, una batalla contra sí mismo de la que salió vencedor. Estos fueron sus quintos y últimos Juegos Olímpicos, su principal inspiración es su hijo.
Fuente: Staff