Rubén Jaén Castaño, el alpinista mexicano que formaba parte de una expedición al Huascarán, Perú, narró en el espacio de José Cárdenas, par UNO TV, como sobrevivió a la avalancha de la que fue rescatado, contó que perdió todas sus cosas y principalmente a sus dos amigos Carlos Belkotosky y José Miguel Mendoza Paulín.
El miércoles pasado, un grupo, entre ellos tres alpinistas mexicanos, sufrieron un accidente en la Cordillera de los Andes; horas después Rubén Jaén fue rescatado, sin embargo, Belkotosky y Paulín perdieron la vida y permanecen desaparecidos.
El mexicano que sobrevivió a la avalancha recordó a Belkotosky como un empresario que hablaba «con la boca llena de orgullo» de sus dos hijos, Max y Renata.
Carlos Belkotosky era un reconocido empresario restaurantero y deportista chihuahuense, quien el 17 de julio, cuatro días antes del accidente, publicó que la expedición acababa de llegar al campo Morrena, ubicado a cuatro mil 600 metros de altura sobre nivel del mar.
Sobre José Miguel Mendoza Paulín, Rubén Jaén escribió que aunque lo conoció poco, sabía que era un atleta de «temple y fortaleza» que cuando escuchaba los mensajes de voz de sus hijos o esposa «se le iluminaba la cara».
«No sé porqué Dios me permitió vivir a mí y no a ellos. Yo estoy bien, pero eso no es importante», escribió.