La tenista rusa Maria Sharapova, ex número uno del mundo, perdió el martes otros dos patrocinadores tras confesar el día anterior que dio positivo en un control antidopaje en el Abierto de Australia disputado en enero.
La estrella del tenis, que dio positivo por una sustancia que ha estado tomando durante 10 años por razones de salud pero que está prohibida desde este año, perdió el respaldo del fabricante de automóviles de lujo Porsche y de la marca suiza de relojes TAG Heuer.
Nike, uno de los más importantes patrocinadores de la rusa, anunció el lunes que suspenderá la relación con la tenista mientras continúa la investigación.
«Lamentamos las noticias actuales sobre Maria Sharapova. Hasta que se conozcan más detalles y seamos capaces de analizar la situación, hemos decidido suspender las actividades previstas», dijo Porsche, una división de Volkswagen, en un comunicado.
TAG Heuer, por su parte, puso fin al contrato de patrocinio con la rusa, que ya se encontraba vencido pero podía ser renovado.
«Maria Sharapova tenía contrato con TAG Heuer hasta el 31 de diciembre de 2015. Habíamos estado en conversaciones para extender nuestra colaboración, pero en vista de la situación actual la marca de relojes suizos suspendió las negociaciones y decidió no renovar el contrato», dijo en un comunicado la unidad del grupo francés de artículos de lujo LVMH.
Sharapova, la deportista de mayores ingresos del mundo, no compite desde que perdió en los cuartos de final del Abierto de Australia en enero y ha sufrido una serie de lesiones en los últimos años. De acuerdo a Forbes, Sharapova ganó 29,5 millones de dólares en el 2015, la mayor parte por contratos comerciales.
Fuente: Radio Fórmula
1 comentario
Sobre la «cruzada nacional del hambre» no se podía esperar lo contrario, solo el resultado negativo por parte de gobierno quien no atina una en ningún aspecto. En lo que acierta es en seguir con la prepotencia, enriquecimiento ilegítimo de todos los políticos y gente que los rodea de una forma u otra, sin descontar la impunidad. Qué vergüenza de gentuza.