Al parecer, el comprador del autorretrato «DHEAD» es un productor de cine y televisión que ha preferido mantener su nombre en el anonimato y que ha justificado la elevada suma por su devoción por el trabajo de Bowie.
«Soy un seguidor de toda la vida (del cantante) y estoy más que encantado de poseer ahora una pieza de arte original hecha por David Bowie», señaló el afortunado fan.
Esa misma persona indicó que el primer álbum que adquirió del camaleónico Bowie fue «Aladdin Sane», publicado en 1973, y se refirió al músico, fallecido el pasado 10 de enero tras luchar durante año y medio contra el cáncer de hígado, como «el mejor artista» de la historia.
Fuente: Excélsior