El sabotaje al proceso electoral sólo conduce a la anarquía; limitar la acción de los órganos del Estado, frenar los procesos políticos, acorralar y desestabilizar al Gobierno federal es privilegiar la ausencia del derecho, lo cual sólo conduce al caos y de ahí a la nada…
La violencia vandálica en las zonas dominadas por la CNTE ha escalado, no sólo por los ataques del lunes a las sedes del INE –en cinco estados– y la quema de miles de boletas en blanco, sino por la expulsión de 15 soldados de las oficinas de la Junta Distrital 08, los bloqueos a las oficinas del SAT y el Registro Civil, la toma de la planta de Pemex, y el asalto a radiodifusoras en la ciudad de Oaxaca y alrededores.
Los maestros disidentes también obligarán a la tropa militar a abandonar las otras 10 juntas distritales del Estado. Con las oficinas del INE bajo su control, la CNTE impedirá el reparto del material electoral y por ende, la elección del domingo 7.
El Gobierno federal sucumbe al chantaje de Rubén Núñez, secretario general de la Sección 22; está contra la pared; en un callejón sin salida. La cancelación temporal de la evaluación educativa ha sido interpretada, dentro y fuera, como un ejemplo de extrema debilidad.
Si el Gobierno logra imponer el orden por la fuerza va directo al zafarrancho, con todas las de perder.
Los agitadores del proceso electoral ya se alistan para llamar a medios de comunicación y observadores de los Derechos Humanos, cuya presencia confirme los atropellos cuando acometa la fuerza pública. La provocación está montada.
No es gratuita la advertencia de Lorenzo Córdova, Presidente Consejero del INE: “estamos preparados para el peor escenario posible” ante las amenazas de la CNTE y otros amagos del magisterio de Chiapas, Puebla, Veracruz, Guerrero y Michoacán…
¿Estamos leyendo el prólogo de otra infamia dizque revolucionaria para demoler la vida democrática?
EL MONJE LOCO: Si alguien está feliz es Michael Platini, líder de la UEFA quien veía a Joseph Blatter como la encarnación del mismísimo demonio. Ahora la suerte del GodBlatter, Padrino de la FIFA Nostra quedó marcada. La reelección del viernes pasado fue pantalla para ganar tiempo extra y organizar una transición pactada dentro del mayor organismo supranacional del mundo mundial. De aquí a enero, cuando se realice una nueva elección, el ex dueño del deporte más popular se va para no volver. Como hábil político que es, se ocupará de amarrar la inmunidad, garantía de su confortable futuro.