Los flujos de Inversión Extranjera Directa (IED) hacia México disminuyeron 5.8 por ciento en 2016, en las cifras preliminares, pero se espera una mayor reducción en este año, ante la incertidumbre en las políticas proteccionistas por parte de Estados Unidos.
La Secretaría de Economía informó que la IED sumó en el año anterior 26 mil 738.6 millones de dólares, por debajo de la cifra preliminar de 2015, de 28 mil 382 millones.
El consenso de analistas consultados por el Banco de México prevén que en este año los flujos de inversión extranjera sumarían 21 mil millones de dólares, que implicaría una baja de 21.5 por ciento.
Carlos Capistrán, economista en jefe de BofA Merrill Lynch, indicó que la incertidumbre en cuanto a los cambios de políticas tanto de Estados Unidos como de México podrían reducir la IED y la inversión nacional, un canal importante para una potencial desaceleración.
“El impacto inmediato de la discusión en políticas anti-comercio sería mayor incertidumbre y una reducción de la IED hacia México”, indicó. Prevé que en el presente año una caída de 35 por ciento en la inversión extranjera.
Avanzan el cuarto trimestre. Los flujos de inversión extranjera subieron 17.1% anual en el cuartro trimestre de 2016 a 5,726.2 millones de dólares.
Acumulado. En los cuatro años que lleva esta administración los flujos de IED suman 134,965 mdd, un 52.5% más que en igual periodo del sexenio previo.
Cifras preliminares. Las cifras reportadas consideran inversiones realizadas y formalmente notificadas que se actualizan posteriormente.
Fernando Ruiz Huarte, director general de Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior Inversión y Tecnología (Comce), destacó que en el último trimestre del 2016 se redujo la inversión que se tenía programada y eso se le puede adjudicar al tema de elecciones de Estados Unidos.
“Esto se debe a que en el último trimestre del año se redujo la inversión que se tenía programada y una parte de eso se le puede adjudicar a las elecciones de Estados Unidos, y la otra parte a que el arranque de nuestras reformas fue más lento de lo que se esperaba”, destacó.
Afirmó que para este año no se pueden hacer proyecciones porque todo dependerá de cómo fluyan las renegociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte y el resultado de éstas.
“Lo que se puede esperar en México es que continúen las inversiones en los sectores menos frágiles ante la incertidumbre, como el turismo, la energía, sobre todo en energías limpias, en actividades de media y alta tecnología, en regiones con incentivos como las Zonas Económicas Especiales y en innovaciones prometedoras”, indicó al respecto Miguel González Ibarra, catedrático de la Facultad de Economía de la UNAM.
En resumen, dijo, habrá una recomposición en el destino de la IED que dependerá de las expectativas de rentabilidad contra la percepción de riesgo en el nuevo escenario que genere ‘trumponomics’.
Estados Unidos fue el país que más aterrizó inversión en México, con 38.9 por ciento del total, equivalente a unos 10 mil 401 millones de dólares.
Sin embargo, dichos flujos implicaron un fuerte descenso, de 31 por ciento, respecto de las cifras preliminares de 2015, cuando se reportaron 15 mil 89 millones de dólares, que representaron 53 por ciento del total.
En importancia, España quedó en segundo lugar como origen de la IED, con 10.7 por ciento del total, seguida de Alemania, con 9 por ciento; Israel, con 7.5 por ciento y Canadá, con 6.3 por ciento y 67 países el 27.6 por ciento restante.
La mayor parte de estos flujos se destinó al sector manufacturero, que concentró 61.3 por ciento de la IED anual. Los servicios financieros destacaron como la siguiente rama con más inversión, al recibir 9.6 por ciento del monto anual, correos y almacenamiento le continuó con 5.9 por ciento.
El 37.8 por ciento de los flujos fue a través de nuevas inversiones; el 31.4 por ciento de cuentas entre compañías y 30.8 por ciento por reinversión de utilidades.
Fuente: El Financiero