El presidente de EU Donald Trump sería recibido en audiencia en el Vaticano por el Papa Francisco hacia finales de mayo, cuando el nuevo inquilino de la Casa Blanca viaja a Italia para la cumbre del G7 (los siete principales países capitalistas), programada en Taormina, Sicilia el 26 y 27 de ese mes.
Es probable que el encuentro se produzca en esa fecha. Los presidentes Barack Obama y George Bush aprovecharon las cumbres del G8: Rusia era entonces parte del grupo hasta que fue suspendido por el conflicto con Ucrania y la anexión de Crimea.
Por otro lado, señala el vaticanista de “The Tablet”, si Trump no aprovechara la oportunidad para encontrarse con el argentino Jorge Bergoglio, su gesto “sería considerado una afrenta”.
Difícil encontrar dos personajes más opuestos que el Papa y The Donald, que ya se han sacado chispas en más de una ocasión. En febrero del año pasado, cuando Francisco viajó a México y el mundo mediático ya apostaba a cuadno y como ambos chocarían en una polémica, Trump lanzó en la campaña electoral presidencial norteamericana más amenazas de deportación de inmigrantes y anunció que crearía un muro extendido a toda la frontera de 3000 kilómetros con México y que el gasto lo pagarían los mexicanos.
Trump calificó al Papa como “una persona muy política, que no comprende los problemas que tiene nuestro país”, ni “el peligro de la frontera abierta que tenemos con México”.
Fuente: Clarín