Un juez federal de Argentina procesó el viernes a la expresidenta Cristina Fernández y a varios de sus antiguos funcionarios por»administración infiel en perjuicio de la administración pública», en una causa en la que se investigan operaciones financieras del Banco Central.
El juez Claudio Bonadío, uno de los principales adversarios de Fernández en la Justicia, argumenta que la exmandataria habría avalado una política a través de la cual la autoridad monetaria vendió millones de dólares a futuro al bajo precio que su Gobierno fijaba en un mercado de cambios regulado.
Como parte del procesamiento, que significa que Fernández está acusada de esos delitos y ahora deberá defenderse en un juicio oral, el juez Bonadío también ordenó un embargo de sus bienes por 15 millones de pesos (1.06 millones de dólares), de acuerdo al Centro de Información Judicial (CIJ).
Cuando el presidente Mauricio Macri reemplazó a Fernández en diciembre, liberó a la plaza cambiaria de las regulaciones y el peso local se hundió casi 30 por ciento, lo que obligó al Estado a poner la diferencia para cumplir con esos contratos a futuro.
Fuente: Excélsior