El papa Francisco condenó «la crueldad» de los bombardeos israelíes en Gaza, tras haberlo hecho, y a pesar de las críticas de la diplomacia israelí, que lo acusó de usar un «doble rasero». Tras el rezo del Ángelus dominical, el líder religioso invocó la necesidad de imponer un alto el fuego navideño en todo el mundo.
«Es con dolor que pienso en Gaza, en tanta crueldad, en los niños ametrallados, en los bombardeos de escuelas y hospitales. ¡Cuánta crueldad!», dijo el líder religioso argentino al final del rezo. Ya el sábado, Francisco había criticado la muerte de siete niños de una misma familia en Gaza. «Ayer bombardearon a niños. No es la guerra, es una crueldad. Y quiero decirlo porque es algo que me conmueve”, dijo entonces.
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Tras el Ángelus, Francisco también abogó por que «en Navidad pueda llegar un alto el fuego en todos los frentes de guerra», desde la Tierra Santa y «todo» Medio Oriente y Ucrania. También recordó este país, que afronta un nuevo invierno invadido por Rusia: «La martirizada Ucrania sigue siendo golpeada por ataques a las ciudades que a veces dañan escuelas, hospitales e iglesias. Que callen las armas y resuenen los cantos navideños», instó.
Autoridades israelíes reaccionaron con indignación a las palabras de Francisco. «Los comentarios del papa son particularmente decepcionantes, porque están desconectados del contexto real y concreto de la lucha de Israel contra el terrorismo yihadista”, reaccionó la cancillería israelí. «Basta ya de dobles raseros y de señalar al Estado judío y a su pueblo”, añadió. «La crueldad es que los terroristas se escondan detrás de niños mientras intentan asesinar a niños israelíes”, insistió la diplomacia israelí.