Doctor Arturo Quintanar, investigador del Instituto de Ciencias de la Atmósfera y cambio climático de la UNAM, en entrevista con José Cárdenas, explicó que el fenómeno meteorológico de «La Niña» genera condiciones que favorecen la sequía: mucha de la humedad y la precipitación que llega a través de, por ejemplo, frentes fríos, deja de venir porque la circulación atmosférica empuja esos fenómenos más hacia el noroeste de los Estados Unidos, donde se vuelve mucho más lluvioso. Por otro lado, el sur de México se vuelve un poco más húmedo. «La Niña» suele causar que el océano Atlántico tenga mayor actividad en cuanto al desarrollo de ciclones tropicales y eso es lo que se pronostica para el verano de 2024.