El estadounidense Spencer Elden, que apareció cuando era un bebé en la portada del disco de Nirvana «Nevermind», una de las portadas más famosos de todos los tiempos, demandó por pornografía infantil a la extinta banda ícono del grunge.
Spencer Elden fue fotografiado en 1991, cuando tenía cuatro meses, desnudo en una piscina y tratando de alcanzar un billete de un dólar enganchado en un anzuelo.
En la demanda se alega que “ni Elden ni sus tutores legales «firmaron un documento autorizando el uso de fotografías de Spencer o de su imagen, y por supuesto tampoco para la explotación comercial de imágenes de pornografía infantil de su persona», sostiene la demanda.
Además, la parte demandante también alegó que Elden nunca había recibido ninguna compensación por aparecer en esa imagen y pidió 150,000 dólares por daños y perjuicios a cada uno de los 15 acusados, incluidos los exmiembros aún vivos de la banda, Dave Grohl y Krist Novoselic, así como sobre los bienes del difunto cantante Kurt Cobain y el fotógrafo Kirk Weddle.
Elden busca una indemnización por, según dice la demanda, “los daños que ha sufrido y seguirá sufriendo de por vida”.