El Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE) confirmó la presencia en México de la mutación E484K y la variante brasileña de COVID-19.
Fue el 29 de enero cuando la Universidad de Guadalajara (UdeG) dio a conocer cuatro casos de coronavirus de Jalisco con la mutación E484K, que fueron confirmados por el InDRE hasta el 15 de febrero.
Posteriormente, el InDRE notificó a la UdeG que derivado de análisis filogenómicos a esos cuatro casos se identificó que pertenecen a la variante P.2 detectada por primera vez en Brasil.
Otras nueve muestras están pendiente de validarse con esas mismas características.
La mutación E484K se ha identificado en la variante brasileña y en la sudafricana.
En entrevista con José Cárdenas, el doctor José Francisco Muñoz Valle, coordinador general de la Sala de Situación en Salud por COVID-19 de la UdeG, señaló que de las mutaciones halladas hasta el momento la E484K es de las que más preocupan.
Lo anterior porque se asocia con la disminución de la neutralización del virus hasta diez veces.
Lo que pudiera pasar es que las vacunas tuvieran una menor eficacia o que se presenten reinfecciones, pero faltan estudios para verificar en qué medida puede bajar la eficacia de la vacuna”, dijo en un comunicado.
Derivado de la detección de la mutación en México la Universidad de Guadalajara inició un Sistema de Vigilancia Epidemiológica Molecular para SARS-CoV-2 en las muestras de pacientes positivos, lo que permitirá implementar estrategias de control efectivas contra el COVID-19.