El candidato correísta Andrés Arauz ganó las elecciones de Ecuador este domingo con una diferencia sustancial de más de 10 puntos porcentuales sobre su rival de centroderecha Guillermo Lasso, aunque insuficiente para imponerse en primera vuelta, según dos sondeos publicados a pie de urna con el cierre de los colegios electorales a las 17:00 h local.
Arauz habría obtenido un 36.2 por ciento de los votos y Lasso 21.7 por ciento según el sondeo de Clima Social, que ha trabajado con su campaña, informó el canal Teleamazonas, mientras otro sondeo, de la empresa Cedatos, que trabajó con la campaña de Lasso, indica que Arauz obtendría un 35 por ciento y Lasso un 25 por ciento.
Las medidas de bioseguridad impuestas para evitar los contagios por COVID-19 al ingresar en los recintos electorales provocaron demoras que sin embargo no peturbaron el proceso de este domingo, en el que 16 contendientes aspiraban a convertirse en el sucesor del presidente Lenín Moreno el próximo mayo en una jornada que parece que llevará a una segunda vuelta.
Sin mayores sobresaltos y con las urnas cerradas a las 17:00 h local, la jornada se caracterizó en las principales ciudades por largas filas de votantes pese a la pandemia, que ha contagiado en el país a más de 258 mil personas y matado a más de 15 mil personas entre casos confirmados y probables.
Las medidas de bioseguridad para evitar el aumento de contagios por las elecciones son las que provocaron las largas colas a las afueras de los recintos, mientras que en el interior se mantenía, por lo general, el distanciamiento, aunque en algunos colegios sí se informó de aglomeraciones.
“¿De qué nos sirve estar afuera en el distanciamiento social, si llegamos acá y no podemos respetar los 2 metros? Es una desorganización del Consejo Nacional Electoral (CNE) que debió haber visto otro recinto, aquí cerca hay otros colegios”, se quejó a Efe Betty Guerrero, quien debió esperar cerca de dos horas para votar.
El director del Servicio Integrado de Seguridad (ECU 911), Juan Zapata, recordó que las elecciones se dan en medio de un escenario inédito y pidió a la ciudadanía mantener la tranquilidad y el distanciamiento.
Las largas filas se registraron desde primerísima hora, cuando se reportaron, además, problemas en la constitución de juntas receptoras del voto, lo que demoró aún más el inicio de la votación en casi la mitad de las mesas, según el CNE.
Milenia Bravo, presidenta de una junta en Quito, explicó a Efe que, al principio, les costó organizarse, pero desde entonces todo se desarrolló con normalidad.
Pero varios ciudadanos se quejaron de esperas de hasta tres horas para acceder a los colegios, en cuyos alrededores estaban prohibidas las ventas de cualquier tipo, como es costumbre en el país.
“Es terrible, mal organizado, creo que cuando había ventas de comidas había menos contacto que ahora, toda la gente está aquí metiéndose, peleando y pierdes tiempo”, señaló por su parte Óscar Peñaherrera en uno de los recintos de la capital.
Además se quejó de que “a veces no hay nadie en las aulas y la gente fuera está peleando por un puesto, generando más contacto que antes, en la normalidad”.
El CNE pidió reiteradamente a la ciudadanía acudir con mascarilla, bolígrafo propio y alcohol, y su presidenta Diana Atamaint manifestó estar sorprendida de la afluencia de votantes pese a la pandemia.
La mayoría de los políticos ejercieron su derecho al voto en las primeras horas.
Lasso, que votó en Guayaquil, se mostró seguro de que habrá una segunda vuelta entre los dos primeros candidatos de las elecciones de hoy, y de que, entonces, su victoria será “contundente”.
La clave es el cambio. Todos los ecuatorianos queremos un cambio para no adoptar un modelo cuyas recetas han fracasado en todos los países del mundo donde se han aplicado”, dijo este abierto opositor al Socialismo del Siglo XXI con el que gobernó el exmandatario Rafael Correa entre 2007 y 2017.
De su lado, el correísta Arauz, que por estar empadronado en México no puede votar en Ecuador, manifestó su convicción de que ganará la presidencia en una sola vuelta.
“El triunfo en una sola vuelta solo es posible si salimos a defender el voto de los ecuatorianos y estar vigilantes de que se cumpla la voluntad popular”, indicó tras acompañar a su abuela de 106 años a votar.
El tercer candidato con mejores proyecciones, según sondeos de la semana pasada, el indígena Yaku Pérez, ejerció su derecho en una parroquia rural de Cuenca, donde tras sufragar insistió en que la suya es una candidatura “del pueblo”.
A las elecciones de este domingo concurrieron un número sin precedentes de candidatos, 16, lo que hacía temer un fraccionamiento que obligue a una segunda vuelta, lo que ocurrirá el 11 de abril si, como parece, ninguno logró obtener la mayoría absoluta (50 por ciento más uno) o tampoco alcanzó el 40 por ciento con una diferencia sobre el segundo candidato de al menos 10 puntos porcentuales.
En el proceso participó una única mujer, Ximena Peña, quien instó a la ciudadanía a acudir a las urnas acatando todas las medidas de bioseguridad.
A esos cuatro candidatos se sumaron el expresidente Lucio Gutiérrez, Gerson Almeida, Isidro Romero, Xavier Hervas, Pedro José Freile, Gustavo Larrea, Guillermo Celi, Juan Fernando Velasco, Paúl Carrasco, César Montúfar, Giovanny Andrade y Carlos Sagñay, todos ellos con posibilidades escasas de llegar al Palacio de Carondelet, la sede de la Presidencia.
Además de presidente y vicepresidente, más de 13 millones de ecuatorianos acudieron este domingo a las urnas para renovar la Asamblea Nacional y designar a 5 integrantes del Parlamento Andino.
Fuente: EFE