Un exjuez de la Corte Suprema de Argentina y otro experto en derecho constitucional asumieron el jueves la defensa del expresidente boliviano Evo Morales y sostuvieron que es infundada la orden de detención en su contra por terrorismo y sedición.
El propio Morales presentó en conferencia de prensa en Buenos Aires a Raúl Zaffaroni, exmiembro del máximo tribunal, y al constitucionalista Gustavo Ferreyra, “grandes abogados, no solamente de Argentina sino de América Latina y de todo el mundo”.
“Quiero decirles que los procesos de terrorismo y sedición ya los enfrenté tantas veces… Las acusaciones siempre vendrán, pero en este momento hay que decir fuera al golpismo. El que protesta contra el gobierno de facto es sedicioso, pero siempre estaremos con la verdad y con la justicia», dijo el exmandatario boliviano, quien se encuentra desde mediados de diciembre radicado en la capital argentina en condición de refugiado político.
La fiscalía boliviana emitió una orden de detención contra Morales el 18 de diciembre bajo los cargos de terrorismo, financiamiento del terrorismo y sedición. Se lo acusa de supuestamente promover los violentos enfrentamientos en su país que dejaron 35 muertos a partir de un audio en el que presuntamente se lo escucha ordenar un cerco a las ciudades para derrocar a la presidenta interina Jeanine Áñez. El líder indígena ha calificado la acusación de un montaje de la derecha.
“Por delito de sedición, terrorismo y financiación del terrorismo hay órdenes de detención firmadas por fiscales, no hay todavía orden firmada por un juez. Eso para nosotros, en caso de que se tramitase pedido de extradición, no sería procedente”, indicó Zaffaroni, quien fue juez del máximo tribunal argentino entre 2003 y 2014 y está ligado al kirchnerismo, la corriente de centroizquierda del peronismo liderada por la actual vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Agregó que “si llegase un pedido a la cancillería argentina y se tramitara en la justicia federal argentina estaríamos hablando de una situación de no derecho”.
Ferreyra, por su parte, acotó que “Argentina no debería responder a ningún pedido que venga de Bolivia porque no es un Estado constitucional”.
Además de estos dos abogados argentinos, también integra la defensa de Morales el exjuez español Baltazar Garzón.
Morales, el primer mandatario indígena en la historia de su país, renunció el 10 de noviembre en medio de protestas sociales y presionado por la falta de apoyo de las fuerzas de seguridad tras acusaciones de fraude en las elecciones del 20 de octubre en la que buscaba su cuarto mandato.
Fuente: El Universal