El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró el viernes que algunas importaciones de vehículos y partes suponen una amenaza para la seguridad nacional, pero retrasó hasta en seis meses la decisión de si imponer aranceles para permitir más tiempo para negociaciones con la Unión Europea y Japón.
La medida sin precedentes contra los vehículos extranjeros importados de algunos de sus aliados más cercanos provocó la molestia de fabricantes, concesionarios y gobiernos extranjeros, tras conocerse un documento de la Casa Blanca que indicó que promovería cuotas de exportación voluntarias de automóviles de socios comerciales.
Toyota Motor Corp, que en marzo anunció una inversión de 13 mil millones de dólares en Estados Unidos hasta 2021, calificó la medida como “un importante retroceso para consumidores, trabajadores y el sector, que envía el mensaje de que nuestras inversiones no son bienvenidas”.
“Rechazamos completamente la idea de que nuestras exportaciones de automóviles sean una amenaza para la seguridad nacional. La UE está preparada para negociar un acuerdo comercial limitado incluidos los automóviles, pero no un comercio administrado ilegal para la OMC”, dijo en Twitter la Comisaria de Comercio europea, Cecilia Malmstroem.
Las normas de la Organización Mundial de Comercio (OMC) prohíben las restricciones voluntarias a la exportación y la UE ha dicho repetidamente que no aceptará ningún cupo para las exportaciones de automóviles.
La decisión de Trump, al menos por ahora, evita lo que se perfilaba como una nueva escalada en las guerras comerciales, incluida una con China.
Trump continuó el viernes atacando a las importaciones de la UE. “Tienen barreras comerciales. No quieren nuestros productos agrícolas, no quieren nuestros autos. Envían Mercedes-Benz aquí como si fueran galletas”, dijo a un grupo de agentes de bienes raíces. “Envían BMW y no les cobramos impuestos”.
El presidente enfrentaba un plazo límite del sábado para tomar una decisión sobre las recomendaciones del Departamento de Comercio para proteger a la industria automotriz de Estados Unidos e imponer, por motivos de seguridad nacional, aranceles de hasta el 25 por ciento.
Trump ordenó al Representante de Comercio, Robert Lighthizer, que prosiga las negociaciones con la UE, Japón y cualquier otro país que considere apropiado e informe en 180 días. Si no se llega a un acuerdo decidirá “si se deben tomar medidas y qué medidas”.
Fuente: 24 Horas