La Navidad llegó con un trago amargo para Wall Street. Los acciones en Estados Unidos cayeron a su nivel más bajo en los últimos 20 meses y se ubicaron al borde de un bear market o mercado bajista, es decir, con una caída de casi 20 por ciento desde su último máximo, debido a la agitación política ese país.
El promedio industrial Dow Jones cayó 2.91 por ciento el pasado lunes, con lo que acumuló un descenso de 18.7 por ciento desde su último pico en octubre a la fecha. El S&P 500, por otro lado, perdió 2.71 por ciento y, de finales de septiembre a la fecha, acumula un desplome de 19.78 por ciento.
Además, el número de operaciones el lunes estuvo 41 por ciento por encima del promedio de 30 días, en una sesión que suele ser suave, antes del festivo de Navidad.
Aunque el impacto fue bajo, la ola negativa también llegó a México. El S&P/BMV IPC retrocedió 0.21 por ciento, con lo que se ubicó en 41 mil 380 unidades, seguida del índice FTSE BIVA que cayó 1.75 por ciento a los 841.53 puntos.
Los inversionistas que buscaron en Washington señales de estabilidad para reforzar su confianza quedaron, en cambio, más preocupados
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, criticó el lunes a la Reserva Federal y la describió como “el único problema” que tiene la economía del país.
“El único problema que tiene nuestra economía es la Fed. Ellos no tienen sensibilidad para el mercado”, escribió Trump en Twitter. “La Fed es como un golfista poderoso que no puede anotar porque no tiene delicadeza, no puede con los golpes suaves”, agregó.
Wall Street reaccionó a los reportes de que Trump ha discutido en privado la posibilidad de despedir a Powell. Mnuchin afirmó el sábado que el mandatario le aseguró que “nunca ha sugerido despedir” al jefe de la Fed.
Los mercados también están preocupados por la paralización parcial del Gobierno que comenzó el sábado tras un punto muerto en el Congreso sobre la exigencia de Trump de más fondos para un muro en la frontera con México.
“Uno pensaría que después de salir de la peor semana para los mercados desde la crisis financiera de 2008, buscaría crear cierta estabilidad”, afirmó Chuck Cumello, director ejecutivo de Essex Financial Services. “En cambio, obtenemos lo contrario con este titular y una mayor incertidumbre autoinducida. Esto viene de un presidente que considera la subida del mercado como un barómetro de su éxito”.
Los comentarios de Trump vinieron después de que Steven Mnuchin convocara una reunión de crisis con los reguladores financieros, quienes supuestamente informaron al secretario del Tesoro que no había nada fuera de lo común en los mercados. Los operadores también evaluaron la amenaza para la economía de un cierre gubernamental que, al parecer, se mantendrá hasta el nuevo año.
“La realidad es que, en Washington, tienes esta enorme cantidad de imprevisibilidad”, afirmó Chad Morganlander, gerente de cartera en Washington Crossing Advisors, a Bloomberg TV. Eso, combinado con las preocupaciones por el crecimiento global y la eliminación de estímulos, “pone nerviosos a los inversionistas, de modo que comprimen los múltiplos, independientemente de cuál sea el contexto en 2020”, dijo.
Fuentes: Bloomberg y Reuters