Los ataques se infligieron en las aldeas de Al Sousa y Al Bubradan, que se encuentran bajo el control de terroristas del grupo del Estado Islámico.
El objetivo proclamado por la coalición internacional, dirigida por el mando de EE.UU., pasa por derrotar a las posiciones de los terroristas del Estado Islámico. Sin embargo, la coalición militar se ha visto implicada en varioscasos de bajas civiles, según múltiples informaciones.
El propio Gobierno sirio ha acusado en muchas ocaciones a la coalición de interferir en los asuntos internos del país, calificando a sus tropas como «fuerzas de ocupación». El pasado mes de septiembre, durante la 73.º Asamblea General de la ONU, el ministro de Asuntos Exteriores de Siria, Walid Muallem, instó a EE.UU., Turquía y Francia a «retirarse inmediatamente y sin condiciones».
Fuente: RT News