Con el mismo arsenal de casi 2 mil emisores que cotizan y están listados en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), la Bolsa Institucional de Valores (BIVA) arranca oficialmente operaciones el próximo miércoles.
Lo anterior deriva de que todas las emisoras de acciones, Fibras, CKDes, Spac’s, deuda e instrumentos listados en el Segmento Global de la BMV, estarán disponibles para su negociación en BIVA, aunque sólo podrán estar listadas en una.
De acuerdo con datos de la Asociación Mexicana de Instituciones Bursátiles (AMIB), hay 142 emisoras listadas en el mercado accionario doméstico. Además, en el inventario hay 736 acciones en el Sistema Internacional de Cotizaciones (SIC), 730 ETFs, 12 Fibras, 80 CKDs y 291 colocadores de deuda privada.
Los precios de los títulos van a ser similares, pero no idénticos, debido al arbitraje electrónico, describió Rodrigo Velasco, director de operaciones de BIVA, toda vez que estarán en la nueva Bolsa los instrumentos del SIC y deuda.
Pese a que BIVA está coqueteando con empresas ya listadas en la BMV para que se muden a la nueva plataforma, el arranque de la nueva Bolsa en México no contará con la presencia de ningún listado. Es decir, no habrá por ahora ninguna migración de BMV a BIVA ni ninguna Oferta Pública Inicial (OPI), reveló María Ariza García Migoya, directora general de BIVA.
Las reglas para el cambio de listado de una bolsa a otra están establecidas en la Circular Única de Emisoras. La empresa tiene que ir a su Consejo de Administración y obtener la aprobación y posteriormente debe notificarle a la CNBV y a la Bolsa. Es un proceso que tarda alrededor de 10 días.
“Tenemos que esperar un tiempo para que las cosas se acomoden tras el arranque de este 25 de julio, una vez que se normalicen las cosas, tenemos ya pláticas con empresas que se listarían en BIVA y que les está llamando la atención la oferta que tenemos, pero el proceso será espaciado, se necesita avisar a la BMV e inversionistas que harán el cambio y hacer el proceso de transición de estar listada en BIVA y dejar la BMV”, describió Ariza.
Para Rubén Domínguez, economista en jefe de GACS, la entrada de BIVA no representa un riesgo en cuanto al volumen de negociación para Grupo BMV, al menos en el corto y mediano plazo.
“No hay un porcentaje exacto de cuánto volumen de la BMV se irá con la competencia, pero sin duda va a ser poco, como 5 por ciento en el mediano plazo, quizás”, prevé Domínguez.
Por otra parte, Gerardo Copca, director de Renta Variable de MetAnálisis, señaló que el volumen de operación de la BMV es bajo, de unos 120 o 130 millones de acciones diarios, y más en verano, por lo que cualquier volumen que le llegue a quitar a la BMV va a ser pequeño.
“Para una sola Bolsa el volumen es bajo. Siempre la competencia es buena para cualquier negocio cuando hay volumen y participación, pero no cuando éste es bajo. Un volumen bueno sería de más de 200 millones de acciones diarias, todavía daría más porcentaje”, comentó Copca.
Fuente: El Financiero