La productora Brave New Films presentó un video que recopila los testimonios de 16 mujeres que de manera pública han acusado al presidente Donald Trump de haberlas acosado o asaltado sexualmente.
El video, presentado esta semana por la productora con sede en California, fue difundido en medio de los escándalos que han vinculado a hombres en posiciones de poder en Estados Unidos con una serie de abusos y patrones de acoso sexual.
Titulado “16 mujeres y Donald Trump”, el material muestra por primera vez, juntos, los testimonios de las personas que han denunciado de manera pública haber sido sexualmente hostigadas o agredidas por el ahora mandatario estadounidense.
16 women have come forward to report being sexually harassed or assaulted by Donald Trump. Isn't it time to hold the most powerful, and public, figure in America to account?
Posted by Brave New Films on Wednesday, November 15, 2017
En un texto publicado en la revista The Nation, el director de Brave New Films, Robert Greenwald, explicó que la sociedad finalmente comienza a hacer que los hombres poderosos rindan cuentas por la manera en que han usado sus posiciones para abusar de las mujeres.
“Pero este movimiento para la rendición de cuentas sonará hueco si no se aplica al hostigador sexual más poderoso y público de Estados Unidos: el presidente”, Robert Greenwald, director de Brave New Films.
En muchos casos, como en el del poderoso productor cinematográfico Harvey Weinstein, los señalamientos han iniciado investigaciones criminales y han terminado, de manera efectiva, su carrera.
Lo mismo ha sucedido en torno a los señalamientos contra el conductor de televisión Charlie Rose y contra el comediante Louis CK, entre docenas de otros hombres poderosos que han sido despedidos de sus empleos o que han sido obligados a renunciar a sus posiciones.
En el caso de Trump, sin embargo, las acusaciones no han provocado ni siquiera una disculpa pública de parte del presidente, quien de manera consistente ha negado los señalamientos, pese a que él mismo aceptara en un audio filtrado que solía tocar los genitales de mujeres atractivas sin su consentimiento.
El presidente no sólo no ha aceptado su culpabilidad sino que incluso ha criticado a un senador demócrata, Al Franken, acusado igualmente de acoso por tratar de besar y por tocar sin su consentimiento a mujeres.
De acuerdo con la Casa Blanca, la diferencia es que mientras que Franken admitió su falta el presidente siempre la ha negado.
Esa renuencia a aceptar que cometió una posible conducta criminal permitió a Trump respaldar incluso de manera implícita al candidato para senador por el estado de Alabama, Roy Moore, acusado por nueve mujeres de abusar de ellas cuando eran menores de edad.
Esta semana, Trump aseguró que Moore, como él, había negado las acusaciones. Añadió: “él dice que no sucedió. Debemos escucharlo también a él”.
Fuente: La Razón