Lewis Hamilton ha celebrado su Gran Premio número 200 con una victoria en el histórico trazado de Spa-Francorchamps. El británico ha dominado la carrera desde el principio hasta la bandera a cuadros, aunque ha tenido que defenderse de los ataques de Sebastian Vettel en el tramo final de la carrera. El alemán ha sido segundo y mantiene el liderato del campeonato por sólo 7 puntos. Daniel Ricciardo, con un sólido pilotaje, ha cerrado el podio.
La salida fue sorprendentemente limpia, y contó con Fernando Alonso como protagonista. El asturiano adelantó tres posiciones en los primeros metros, aunque mermado por su motor, no pudo defenderse de los ataques de Hülkenberg y los Force India en las primeras vueltas. «Vergonzoso», soltó por radio al verse incapaz de defenderse de los ataques de los rivales en las rectas. La misma historia de siempre.
Por delante, ningún cambio entre los favoritos al inicio, Hamilton se mantuvo al frente seguido por Vettel, Bottas y Räikkönen. En esta ocasión, y por sorpresa, Max Versatppen no lanzó ningún ataque en la salida, pero de nuevo un problema en su unidad de potencia le apartó de la carrera en la vuelta 8.
Hamilton trataba de abrir hueco, pero no consiguió que la diferencia con Vettel se fuera a más de dos segundos después de 10 giros –momento en el que comenzaba a aparecer blistering en las gomas de algunos pilotos–. Justo por detrás y algo descolgados, Bottas no tenía problemas para defenderse del otro Ferrari.
La primera parada en boxes comenzó en la vuelta 11 con los pilotos de mitad de parrilla, todos optaron por gomas blandas, a excepción de los Force India con superblando.Los Mercedes entraron a montar en las vueltas 13 –Hamilton– y 14 –Bottas– para montar el compuesto blando. La vuelta 15 fue la elegida por Ferrari para parar a Vettel.
Mientras tanto Kimi Räikkönen trataba de frenar a Hamilton, pero la flecha plateada del inglés le arrancó las pegatinas a las primeras de cambio en la salida del Raidillon. El finés paró en esa misma vuelta para montar neumáticos blandos, una parada que llegó con penalización de 10 segundos por no respetar doble bandera amarilla. Vettel se aproximó a Hamilton en el arranque del segundo stint y se colocó a tiro de DRS, pero el británico despertó y subió el ritmo para alejarse a más de un segundo.
La parada de Carlos Sainz llegó en la vuelta 20. El piloto de Toro Rosso fue el único de la parrilla que optó por completar la carrera con un solo cambio de neumáticos. Por detrás, el Alonso más enfadado de los últimos tiempos pedía que no le hablaran más por radio en el resto de la carrera. Indignación ante un motor que no está al nivel del Gran Circo, y que dijo basta en la vuelta 27.
El duelo en la zona media tuvo de nuevo a los Force India como actores principales. Otro toque entre ambos que acabó con la esperanza de lograr un buen resultado en Spa. El alerón delantero de Ocon saltó por los aires y Pérez pinchó a causa de su choque. Safety car en pista y todos a boxes.
Vettel optó por una estrategia agresiva montando el compuesto ultrablando para las últimas 13 vueltas, mientras que Hamilton montó neumático blando para acabar la carrera, algo que daba ventaja. En esta ocasión sin incidentes, la carrera se relanzó y Lewis logró defenderse de un ataque muy agresivo del piloto de Ferrari. Por detrás Ricciardo y Räikkönen se aprovecharon del rebufo –y la goma blanda– de Bottas para adelantarle.
Fuente: Staff