POR LA ESPIRAL
Claudia Luna Palencia
@claudialunapale
Fabiola N. lleva el mismo peregrinar que tantos otros de sus compatriotas ella dejó el terruño amado en Maracaibo cuando la carestía y la especulación se apoderó de todos los anaqueles, de todos los almacenes en los supermercados, porque un litro de leche puede conseguirse en Venezuela pero al precio de diez.
Ella, como pediatra de una familia de clase media profesionista y formada fue experimentando un deterioro en su calidad de vida y en sus libertades civiles año tras año desde 1999 cuando el llamado “Chavismo” irrumpió en la vida política venezolana.
Ha sido de las afortunadas que juntó unos dolaritos para dejar su vida en la nación sudamericana y probar fortuna en España, que se ha convertido en un importante bastión para la disidencia, los grupos opositores al gobierno de Nicolás Maduro aunque también cada día arriban más y más personas que como Fabiola (hay más de 40 mil venezolanos en España) han salido literalmente huyendo de su país atrapado en una dictadura simulada a lo largo de 18 años.
Ella no puede más que ver desgarrarse desde afuera la nación añorada, de vez en vez participar en las manifestaciones por las plazas de Sol y de Colón exigiendo democracia y la deposición del heredero político e ideológico del fallecido Hugo Chávez; al tiempo que pululan por las redes sociales los emoticonos de la bandera venezolana al lado de un corazón roto.
La oposición y los familiares de los perseguidos políticos siguen clamando porque la ONU y la Unión Europea (UE) fuercen la salida de Maduro al tiempo que se garantice la libertad así como la protección de más de 500 presos políticos.
El escenario interno puede desbocarse aún más en la medida en que la dictadura salga finalmente del armario después de las elecciones para una Asamblea Constituyente celebradas el domingo 30 de julio, en la que cifras oficiales apuntaron a una victoria avalada por 8 millones 089 mil 320 electores.
“Tememos que empeore”, denunció en Madrid Mitzy Capriles a escasas horas de la detención de su marido Antonio Ledezma, alcalde de Caracas y de la reaprehensión del también opositor Leopoldo López que cumplía un arresto domiciliario tras salir de la cárcel de Ramo Verde hace un mes.
Desde la sede de la Asociación de la Prensa de Madrid, Capriles denunció los arrestos “fuera de la ley” y totalmente violatorios de los derechos humanos al tiempo que refrendó seguirán en pie de lucha contra Maduro a pesar de la desazón espiritual y moral.
“A Antonio lo sacaron de la casa en Caracas a las 5.30 de la mañana hora de España, en ese momento me llamó una de mis hijas para decirme que se acababan de llevar detenido a su padre sin la presencia de un abogado… sin nada”, denunció visiblemente afectada.
También por orden del presidente Maduro sacaron de su domicilio a López con la intención de trasladar tanto a Ledezma como a López de vuelta al centro penitenciario de Ramo Verde.
“Nos preocupa mucho la situación de todos los presos políticos, quiero decir además que en Ramo Verde torturan y lo hacen de diversa formas tanto física como moral, psicológica y psíquicamente. A Leopoldo antes de salir de arresto domiciliario le envenenaron la comida y estuvo diez días muy malo”, destacó Capriles con voz entrecortada.
A la inesperada rueda de prensa a la que asistí pude atestiguar la presencia de otras fuerzas opositoras a Maduro y que a pesar del exilio se mantienen activas buscando por todos los medios y cauces hacer eco internacional para que los ojos del mundo se posen en su maltrecha nación.
Queremos decirle al mundo, abundó Capriles que esto es “Venezuela S.O.S” estamos pidiendo auxilio “el narcodictador se está volviendo más peligroso porque se ve sin ningún respaldo popular por eso pedimos a las instituciones europeas que no se cansen que tomen las medidas necesarias para presionar porque allá están sucediendo crímenes de lesa humanidad”.
A COLACIÓN
España ha sido un actor activo en este conflicto desde diversos frentes: tanto del que deriva del actual gobierno del PP llevado a cabo por el presidente Mariano Rajoy como por la intermediación del ex presidente socialista José Luis Rodríguez Zapatero, de alguna forma se ha convertido en eco en Europa del drama venezolano.
Aunque como lo señaló Capriles, a pregunta expresa de qué tanto le ha servido a los venezolanos la mediación de Zapatero: “Nos opusimos porque su presencia no fue precisamente feliz él estaba del lado del dictador Maduro y nosotros en términos generales veíamos una parcialidad abierta hacia el Gobierno del dictador Maduro”.
-¿Su papel en el referéndum revocatorio?
“Un desastre porque él ex presidente Zapatero dijo que no era necesario el referéndum para nosotros el error como opositores democráticos fue permitir que Maduro pusiera a ex presidentes en una mesa de conciliación; eso nos debilitó. Pero quiero decir que para nada fue útil a Venezuela la mediación e intermediación del presidente Zapatero”.
Directora de Conexión Hispanoamérica, economista experta en periodismo económico y escritora de temas internacionales