EU se niega a reconocer que productos como el queso suizo, yogurt griego, salchicha italiana, aliño francés o los waffles belgas sean protegidos por indicaciones de origen, como pide la UE.
La UE quiere que nuestro país proteja sus productos con indicación originaria de derivados de la leche provenientes de EU.
Presionado por la Unión Europea (UE), México podría imponer restricciones a productos lácteos estadounidenses a través de regulaciones sobre indicaciones geográficas, advirtieron la Federación Nacional de Productores de Leche y el Consejo de Exportación de Productos Lácteos de Estados Unidos.
Estos cambios podrían hacerse en las actualizaciones del Tratado de Libre Comercio entre la Unión Europea y México (TLCUEM) y de la Asociación Europea de Libre Comercio (AELC), entre Suiza, Noruega, Liechtenstein, Finlandia y México, en las que se proyecta incorporar disposiciones relacionadas con indicaciones geográficas.
“Como pretende hacer a través de todos sus tratados de libre comercio, la Unión Europea ha estado intentando utilizar ese proceso para imponer barreras de facto al comercio y la competencia sobre varios productos de nombre común que la UE pretende falsamente como indicaciones geográficas”, dijo Shawna Morris, vicepresidenta del Consejo de Exportación de Productos Lácteos de Estados Unidos.
Morris dijo que la AELC busca restringir el comercio. Dado el amplio uso común de los nombres de países (por ejemplo, queso suizo, yogurt griego, salchicha italiana, aliño francés, waffles belgas y tocino canadiense), sería totalmente “inapropiado” prohibir su uso sin excepciones claras. Indicó que por ello es esencial que el compromiso continuo con México y las discusiones sobre la modernización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) demuestren que Estados Unidos se opone a la imposición de nuevas restricciones a las oportunidades de acceso a los mercados para los productos estadounidenses que dependen de nombres comunes.
Además, algunos productos con indicaciones geográficas destacadas, como el prosciutto di Parma o el prosciutto di San Daniele, podrán venderse finalmente en Canadá con su denominación después de más de 20 años de no poder hacerlo.
“Las compañías de Estados Unidos han estado trabajando años con los socios en la industria lechera mexicana para construir el tamaño y la variedad de la demanda del queso en México. Es por eso que los esfuerzos de la Unión Europea para restringir la competencia en México son tan profundamente preocupantes”, expresó Morris.
En paralelo, dijo, México ha visto “una ola” de solicitudes de indicaciones geográficas a través de su adhesión al Acuerdo de Lisboa de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual. Estas incluyen quesos como el asiago y el gorgonzola, que Estados Unidos no sólo exportó a México en cantidades significativas, sino que esencialmente creó el mercado en los últimos años. (ROBERTO MORALES. EL ECONOMISTA)